Firman convenio IEM y Salud para detectar a víctimas de violencia de género en atenciones hospitalarias
Una firma del convenio de colaboración para detectar a víctimas de violencia de género en las atenciones hospitalarias, suscribieron la Secretaría de Salud de Tabasco y el Instituto Estatal de las Mujeres.
La titular del IEM, Nelly Vargas Pérez, indicó que la intención es aplicar la Norma Oficial Mexicana NOM-046-SSA2-2005 que ordena una detección temprana de la violencia contra las mujeres, así como la constante capacitación del personal de salud para la prestación de sus servicios con perspectiva de género.
“Es de enorme importancia que las instituciones públicas en salud detecten y registren con precisión la violencia de genero; su primer contacto con las víctimas es una gran oportunidad para aplicar la NOM046 y evitar que la violencia termine en un feminicidio, en un embarazo no deseado, en una discapacidad o en una enfermedad crónica, es por ello que este convenio de colaboración, para erradicar estas formas de violencia que viven muchas mujeres y niñas de nuestro estado”, manifestó.
Por su parte, la secretaria de Salud, Silvia Roldán Fernández, admitió que en muchas atenciones de violencia que atienden en los hospitales, el personal médico lo considera como algo común y no lo reportan.
“Todavía nosotros vemos una gran cantidad de mujeres que vienen a nuestros hospitales y que finalmente el personal que tenemos en las áreas no las notifican porque lo ven como una cuestión normal”, externó.
No obstante, la funcionaria estatal también señaló que en el caso del embarazo de niñas de 10 años, son las mamás o abuelas quienes no denuncian al agresor por ser un conocido.
“Detectamos a mujeres, detectamos a niñas que llegan embarazadas, de 10, de 11 años, y que la propia mamá o la abuela no quieren que se sepa que la violó una gente de la familia”, expuso.
El convenio también implicará el realizar campañas de concientización del derecho a una vida libre de violencia sexual, principalmente para el sector indígena, migrantes y adolescentes, donde los principales agresores son sus parejas.