Especialista narra que estaba en pleno trasplante y lo detuvo, a petición de un familiar

Cuando hay fe y optimismo las cosas son mejor

• Andrés Olmos
• Diciembre 25, 2024 - 10:35 p.m.
• TABASCO

En el año de 1994, inició su carrera cuando participó por primera vez en un trasplante en el Centro Médico Nacional Siglo XXI de la Ciudad de México, siendo médico residente en Medicina Interna.

Desde entonces, el doctor Augusto Soto García ha realizado entre 180 y 200 trasplante de riñones, tanto en Tabasco como fuera de la entidad, aunque la mayoría han sido en el estado, donde ha sido uno de los pioneros en estos procedimientos.

Sin embargo, a lo largo de todos estos años ha tenido diversas experiencias, ya que cada caso es muy distinto, algunos son fáciles y otros más tienen sus complejidades, en ocasiones porque falta el donante y unas más por la resistencia de la familia de los donantes.

En este sentido, narró a Telereportaje que, en una ocasión, tuvo que suspender la intervención, luego de que un familiar del donante no estuviera de acuerdo, y amenazara con demandar si continuaban con el procedimiento.

Soto García también dijo que, en otra ocasión, se complicó debido a una infección en la receptora.

De igual forma, comentó que cuando concluye la cirugía con éxito, y ve al paciente despertar, sabiendo que todo está bien, siente una gran satisfacción, por haber contribuido a salvar la vida de una persona.

Sin embargo, admitió que también siente miedo cuando se le presenta una persona que busca un trasplante y no puede cumplir por los diversos factores que se presentan, durante el proceso, desde la búsqueda del donante hasta la operación.

El especialista reconoció que le preocupa que, durante la operación, el receptor pueda fallecer y no contar con todo el apoyo del hospital o de los familiares, al precisar que cuando tiene estos dos elementos a su favor, cuando ve fe y optimismo en los familiares de los pacientes, las cosas para él son mejor.