Autoridades deben definir mejor opción de Presas del Alto Grijalva en función del cambio climático: Ramsés Pech
Señaló que a las cuatro hidroeléctricas del Alto Grijalva (Angostura, Chicoasén, Malpaso y Peñitas) se les ha tratado de utilizar para producir energía eléctrica, pese a que no aprovechan el total de sus capacidades.
“¿Qué pasaría si de las cuatro presas pudiéramos dejar nada más dos para generar electricidad, y las que causan problemas para Tabasco pudieran utilizarse para un sistema de riego o control del río? Esto significaría que pudiéramos bajar los niveles de estas presas, que hoy actualmente tienen que mantenerse en ciertos niveles en función de lo que se necesita generar, y solo se utilizara para riego o el control del cauce del río Grijalva”, planteó.
Pech Razo, manifestó que el manejo de las presas está siendo de vital importancia ante los cambios climáticos, y en forma constante por las lluvias atípicas por arriba de la media observada en años anteriores, ocasionando una desproporción y variabilidad en el manejo, derivado de que no hay una predicción confiable en cuanto al volumen de las precipitaciones que pudieran originar ciertos ciclones, tormentas o nortes que afecten la zona.
“La solución está, solo hay que ponernos de acuerdo entre CONAGUA, CFE, los estados de Chiapas y Tabasco para decidir cuál es la mejor opción de las hidroeléctricas en función del cambio climático, y que es muy complicado hoy en día saber a grandes rasgos cuánta lluvia va a caer en cada tormenta y no sabemos el volumen de agua”, aseveró.
En el caso de Peñitas, consideró que debe utilizarse para el control del cauce del río o para riego, pues su capacidad no se utiliza los 365 días del año para generar electricidad, por lo que puede ser sustituido por una planta de ciclo combinado.
“La única solución que puede existir en corto plazo y a mediano plazo, es dejar la presa Peñitas solo para el control del cauce del río o utilizar esta agua para el riego que puede haber en ciertas zonas aledañas”, comentó.
Por otra parte, el especialista refirió que en caso de que se deje alguna presa para el manejo del río Grijalva, entonces el dragado en Frontera, Centla no es el indicado, sino que la opción sería la construcción de una escollera.
“Lo que hay que hacer ya es una escollera para limitar la cantidad que se taponea en la entrada de Frontera (…) esa sería una función de la SCT Federal para que en conjunto con el estado de Tabasco y los órganos federales puedan construir esas escolleras, y el puerto de Frontera no necesitaría estar haciendo dragados cada mes o cada cierto periodo de tiempo”, asentó.