García Luna acusa a AMLO y "operadores" de nexos con el narco

El exsecretario de Seguridad Genaro García Luna acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador y a sus "operadores" de nexos con el narcotráfico. 

A través de una carta, dada a conocer por periodistas, dijo que "es del conocimiento público y está en los registros oficiales" de México y Estados Unidos los "contactos, videos, audios, fotografías, registro de comunicación y gestión" entre el actual mandatario federal con los líderes criminales "y sus familias", en particular con aquellos que fueron "utilizados como testigos" durante el juicio en su contra. 

Indicó que, inclusive, los narcotraficantes imputaron al tabasqueño, lo cual también se corroboró con la reciente captura de Ismael "El Mayo" Zambada y sus declaraciones, en las que señala "los vínculos del actual gobierno con él y el narcotráfico" y la posición del gobierno de México contra su captura.

"DESMANTELAMIENTO" DEL PODER JUDICIAL

Por otro lado, el exfuncionario subrayó que los principales beneficiados del desmantelamiento del Poder Judicial de México son los criminales, lo cual se ratifica, por ejemplo, con la pausa-suspensión de relaciones oficiales entre México y la Embajada de Estados Unidos, debido a la postura de esta última. 

SOBRE SU DETENCIÓN Y PROCESAMIENTO

En la misiva, García Luna relató que, desde su arresto, las autoridades estadounidenses le ofrecieron un acuerdo para que se inculpara de delitos de narcotráfico y se convirtiera en testigo, a cambio de una condena de solo seis meses, así como de beneficios económicos.

Sin embargo, dijo que lo rechazó ya que debía imputar a "personas e instituciones que, a corto plazo debilitaría el desabollo, paz pública y vida institucional" de México. 

Narró que, cuando inició su juicio, los fiscales no presentaron una sola prueba o evidencia que acreditara los delitos de los que lo señalaban. Recordó que tanto una corte de Estados Unidos como un Tribunal mexicano resolvieron que no existía evidencia que acreditara ingresos ilegales en su patrimonio mientras se desempeñó como secretario de Seguridad.  

En ese sentido, atajó que durante su juicio se utilizó "información falsa proporcionada por el gobierno de México y los dichos de testigos con antecedentes criminales", y que con esto se llevara a cabo la sentencia en su contra. 

El exfuncionario enfatizó que ha estado encarcelado en Nueva York "en condiciones infrahumanas", que ha presenciado homicidios y apuñalamientos, que ha enfrentado amenazas sistemáticas y que fue segregado casi un año a las celdas de castigo "sin haber violado alguna norma" y "sin tener un registro de mal comportamiento".

Sin embargo, expresó que es "una persona que respeta la ley" y que seguirá con la conducción de sus abogados "agotando todos los recursos legales que prevé la ley" hasta lograr su libertad. 

"Mi honor está intacto, Yo no he cometido ningún delito", finalizó.