Amaga AMLO con vetar ‘Plan B’ de reforma electoral, por cláusula de “vida eterna” a partidos

El presidente Andrés Manuel López Obrador, amagó con vetar las reformas a las leyes secundarias en materia electoral, si la Cámara de Diputados no quita la transferencia de votos para darle “vida eterna” a los llamados partidos satélites.

Durante su conferencia de prensa en Palacio Nacional, fue cuestionado sobre este tema, luego de que el Senado de la República avaló dichas propuestas hechas por el PT y el PVEM, sin embargo, dijo que revisaría a fondo el dictamen.

“Si lo considero la puedo vetar, si es un asunto de principios, lo hago, porque somos demócratas auténticos, no farsantes. Y si me pasa esto, y considero que sí es una contradicción y que sí afecta, la veto - ¿aunque se invalide todo? – Aunque se invalide todo. Por encima de los principios, nada”, aseveró.

No obstante, dejó en manos de la Cámara de Diputados este tema, en cuanto a si mantienen o desechan las modificaciones planteadas por la Cámara Alta.

“Si en la Cámara de Diputados consideran de que no debe hacerse para atrás, no le hace que lleve más tiempo. Si la Cámara de Diputados considera que eso estuvo mal, pa' tras. Que ellos lo debatan y que se defiendan siempre los principios”, dijo.

Por otra parte, reviró a sus adversarios que él no es ningún cacique, esto, cuando explicaba que  aunque no pase el “Plan B” de la Reforma Electoral, de todas maneras el pueblo seguirá mandando y no la oposición.

“La democracia en México es el pueblo, ya no es la oligarquía, entonces si pasa la ley, bien, sería bueno, ayuda, pero si no pasa, de todas maneras va a ser el pueblo el que va a decidir y va a seguir mandando, ¿o creen ustedes que será el grupo de Claudio X. González?; no soy cacique”, enfatizó.

Cabe mencionar que entre las modificaciones planteadas por el Senado al “Plan B” de la Reforma Electoral de López Obrador, que establece la supervivencia de un partido, mediante la transferencia de votos de sus aliados cuando van en alianza o coalición, además de que tendrán “vida eterna”, aún y cuando no alcancen el tres por ciento de la votación que marca la ley.