SEP no acreditó que libros se hicieran conforme a planes de estudio aprobados: Jueza

El material educativo ya comenzó a ser repartido en las instituciones pese a la orden judicial

SEP no acreditó que libros se hicieran conforme a planes de estudio aprobados: Jueza

Una jueza federal determinó que la SEP no acreditó que los nuevos libros de texto gratuitos se hicieran conforme a programas y planes de estudio previamente aprobados para el ciclo escolar 2023-2024.

Mediante una notificación, Yadira Medina, titular del Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa en la Ciudad de México, y quien está a cargo del juicio de amparo promovido por la Unión Nacional de Padres de Familia para frenar la distribución de dichos materiales, reconoció que la SEP le entregó diversas constancias para acreditar que cumplieron con la ley para la implementación de los libros.

Sin embargo, señaló que estas "no acreditan que, de no haberse aprobado los programas de estudios en los términos indicados en la normatividad vigente, a fin de salvaguardar el derecho a la educación, implementaron los mecanismos necesarios para que la impresión de los libros de texto se realice conforme a los programas y planes que previamente hayan sido aprobados, con las formalidades legales respectivas".

Cabe recordar que la juzgadora ordenó a la dependencia federal el pasado 28 de julio que, en un plazo de 24 horas a partir de ser notificada, entregara todas las constancias que acreditaran que siguió la normativa y todos los procedimientos legales para imprimir los nuevos libros de texto. 

Posteriormente, determinó que si la SEP no había cumplido con dichos requerimientos, debía abstenerse de continuar con la impresión de dichos materiales en tanto se resuelve el caso, como parte de una medida cautelar que concedió a la organización de padres de familia.

La jueza Yadira Medina tiene programada para el próximo 18 de agosto la audiencia constitucional en la que definirá si concede el amparo a los padres de familia y frena definitivamente la distribución de los libros, mismos que ya comenzaron a ser repartidos en las instituciones educativas pese a la orden judicial.