"Hay presupuesto y no hay límites para apoyo": Obrador a adversarios ante críticas por desaparición del Fonden

El presidente Andrés Manuel López Obrador, lamentó que sus adversarios estén tratando de descalificar al gobierno con el argumento de que se desapareció el El Fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales (Fonden).

Garantizó que hay un recurso especial para atender este tipo de eventos y puntualizó que no hay límite presupuestal para atender la emergencia.

Sostuvo que ni siquiera habían pasado los efectos del fenómeno natural y sus adversarios ya estaban hablando de que no habría recursos para la atención de la situación.

"No se trata de fideicomisos, no se trata de fondos para atender emergencias, cuando el pueblo de México necesita apoyo se puede utilizar todo el presupuesto público, no hay límites. Y afortunadamente tenemos presupuesto precisamente porque no permitimos que se roben el dinero del pueblo", comentó.

Explicó que ese fideicomiso se desapareció porque era una caja chica de la Secretaría de Gobernación, en la que se robaban el dinero, aprovechándose de las emergencias por desastres naturales.

"Era como repartirse un botín cuando había una desgracia. Los gobiernos estatales reclamaban lo del Fonden, porque era el momento de robar a manos llenas y de manera impune. Cuando se trata de una desgracia como esta no se comprueba nada o, mejor dicho, no se licita nada, está permitido comprar a cualquier precio por la situación de emergencia. Había un grupo en el gobierno anterior de proveedores exclusivos. Todo este fondo lo manejaba la Secretaría de Gobernación", dijo.

Luego de hablar de sus adversarios, el presidente se dijo contento por la solidaridad que percibió de la gente de Guerrero durante su recorrido hacia el puerto de Acapulco.

Contó que su vehículo quedó atascado, por lo que tuvo que caminar un par de kilómetros. Lo anterior lo relacionó con los caminos de Macuspana cuando no estaban pavimentados. 

"Pero cuando llovía para pasar, para llegar a Macuspana había que atascarse y bajarse, todos nos bajábamos, bueno, yo estaba niño, pero los grandes a jalar el camión. Había que llevar, se quitaba uno los zapatos y ya en una bolsita, porque cuando patinaba en el lodo tardaba uno en llegar. Así era la vida antes. Entonces, ayer nos atascamos y caminamos a pie. Me dio mucho gusto porque ya tenía tiempo que no caminaba, andaba con un problema del carcañal. Y luego, ya donde no se pudo, del otro lado había una camioneta de una empresa minera, y ya me dieron el aventón y ahí seguimos hasta que llegamos a Acapulco. Y qué bueno que tardamos en llegar a Acapulco porque fuimos viendo todos los daños pueblo por pueblo y constatando lo que había sucedido, y cómo la gente ayudando", narró. 

López Obrador agradeció a una persona que le dio "un aventón" después que estuvo caminando algunos kilómetros para poder llegar al puerto de Acapulco.