Asegura Calderón que nunca tuvo evidencia que involucrara a García Luna con el narco

El expresidente de México, Felipe Calderón, afirmó que nunca tuvo conocimiento de que su exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, estuviera involucrado en actividades ilícitas, como su vínculo con el narcotráfico y por lo que este miércoles fue condenado a más de 38 años de prisión por la Corte de Brooklyn.

Lo anterior se da, luego de que el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, le pidiera explicar si sabía de los nexos del exfuncionario con el Cártel de Sinaloa, y si no se enteró, el por qué.

"Tendría que dar toda la explicación de por qué lo invitó y qué fue lo que pasó para que se coludiera. Y también él tendría que explicar si se enteró, y si no se enteró, ¿por qué no se enteró? Porque al final de cuentas el Ejecutivo Federal es responsable también de todo su equipo de gobierno", cuestionó.

Posteriormente, a través de su cuenta de X, el exmandatario surgido de las filas del mismo Acción Nacional, sostuvo que nunca tuvo "evidencia verificable" que involucrara a García Luna con actividades ilícitas, y que tampoco recibió información en ese sentido por parte de agencias de inteligencia mexicanas o extranjeras, las cuales dijo, en aquel entonces confiaban e interactuaban con el exsecretario de Seguridad Pública.

"No he tenido acceso a las evidencias ni a los testimonios que se presentaron en el juicio, pero soy hombre de leyes y respeto la acción de los tribunales. Asumo que han actuado conforme a su leal saber y entender. Por lo mismo, soy partidario de que quien infrinja la ley debe asumir las consecuencias de sus actos", añadió.

Indicó que la lucha por la seguridad de los mexicanos no fue responsabilidad de una sola persona, sino de todo un equipo de gobierno, en donde miles de mujeres y hombres arriesgaron su propia vida para defender al país del crimen organizado, al cual calificó como el "verdadero enemigo" de México.

Asimismo, Calderón Hinojosa reconoció que enfrentar al crimen organizado, fue una de las decisiones más difíciles de su vida, sin embargo, aseveró que lo "volvería a hacer, porque es lo correcto".

"Mi política de seguridad tuvo aciertos y errores. Enfrentamos a un enemigo poderoso que busca la Captura del Estado, es decir, controlar territorios por la fuerza, apoderarse de instituciones, corromper funcionarios y dividir y atemorizar a la sociedad. A pesar de todo, en 2012, cuando dejé el gobierno, el Estado avanzaba, y el crimen organizado retrocedía", aseguró.

Por último, Felipe Calderón consideró que lo que falta para derrotar al crimen organizado en México es "unidad de propósito", al señalar que un país dividido, polarizado y peleado internamente puede ser derrotado, pero unido, puede luchar y prevalecer.

"El nuevo gobierno tiene la oportunidad de actuar eficazmente en defensa de las familias mexicanas. Puede fortalecer lo que se haya hecho bien, y corregir lo que se tenga que corregir, tanto de mi gobierno como de los que me sucedieron. Ojalá pueda convocar a una verdadera Política de Estado en materia de seguridad y justicia que, más allá de la polarización política, sume los esfuerzos de todos para derrotar al verdadero enemigo de México", expresó.