Presenta SAS balance sobre cárcamos, plantas y drenes a días de terminar la administración

Los hundimientos, filtraciones y socavones en el municipio de Centro no se van a terminar si no se cambia la tubería completa, reconoció el director del Sistema de Agua y Saneamiento, Luis Contreras.

En Telereportaje, el funcionario municipal presentó un balance sobre los cárcamos, plantas y drenes, a unos días de terminar la presente administración y ventiló que cerca del 30% del presupuesto asignado a Centro, se va justamente a su área, por los problemas que carga desde hace décadas.

“Nosotros cuando recibimos la administración, había 486 hundimientos, pero hemos reparado 600 hundimientos, y nos quedan 190 pendientes. De manera permanente están surgiendo los socavones, porque es tubería que no sirve, que se utilizaban hace 50 años, que reparas y sale otro. Es urgente cambiar esa tubería. -¿Todos los socavones se van a resolver hasta que se cambie toda la tubería? –Es correcto. Tiene que ser una solución multianual. El 30% del presupuesto del municipio se va en el Sistema de Agua y Saneamiento, porque todos los días hay problemas.”

Luis Contreras lamentó que la ciudadanía ha utilizado los drenes y canales como basurero, lo que podría ocasionar nuevos problemas en esta temporada de lluvias si no se despejan.

“Eso se tiene que hacer de manera permanente, porque la gente tira basura, estufas, llantas, hasta coches, y luego, cuando llegan las lluvias, todo mundo padece del agua, pero todos somos parte del problema. El 87% del agua que llueve se va por drenes, y el 13% se va a través de los cárcamos. Se va a trabajar esta semana para limpiar los drenes, porque es urgente esto.”

Finalmente, el titular del SAS informó que los cárcamos del municipio operaron de manera correcta durante las pasadas lluvias, pero que las precipitaciones superaron la capacidad de la infraestructura con la que se cuenta. 

“Tenemos en el municipio de Centro 112 cárcamos y nos cayó el viernes 180 milímetros de agua, en 18 horas. Se complicó porque el río Pichucalco venía cargado de agua, también en la Sierra, pero los cárcamos operaron de manera correcta. Recordemos que no tenemos un sistema de alcantarillado pluvial, todo es sanitario. En esta ocasión fue necesario meter todo el equipo disponible para operar, y en el transcurso de la lluvia, puede tener problemas.”