Reformas sobre outsourcing protegen al trabajador, admite López Deantes

“Por unos pecadores pagaron todos los justos. El outsourcing comenzó muy mal. El fondo es que una nómina no se puede deducir al 100%, sólo hasta el 53%. Lo demás hay que pagarlo de impuestos. El patrón siempre busca la manera de deducir el 100%. Entonces empezaron a contratar a todos en outsourcing, cuando sólo se trata de trabajo especializado. Se sumó la venta de facturas. Engañaron al fisco, que lo sabía, porque también el Gobierno contrataba a ese tipo de empresas”, recordó.

Asimismo, el fiscalista consideró que algunas empresas han llegado a cometer faltas criminales, como no permitir a sus trabajadores cotizar en el Seguro Social.

“Cuando contratabas a un trabajador les pagaban una cantidad muy pequeña en el IMSS; muchos los dejaban sin Seguridad Social ni Infonavit. Se abusó. Gente a quien no le dan su jubilación porque nunca los pusieron en el IMSS. Muchos lo que hacen es crear nuevas empresas para darlos de alta, sin embargo, esto afecta al trabajador porque se exenta de pagar reparto de utilidades cuando es empresa de nueva creación. Da un golpe de autoridad el gobierno para los próximos años”, consideró.

Por otra parte, Raúl López Deantes acusó que, en gobiernos pasados, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) dio privilegios a grandes empresas, con la exención de impuestos, mientras los pequeños contribuyentes pagaban el 100% de ellos.

“La tasa de ISR es del 30%, pero cuando deduces es menor. El SAT está midiendo, para que pagues lo que debe ser. De cada 10 pesos que recauda la Federación, 7 corresponden a estos grandes contribuyentes. En años anteriores dejaron que estos grupos mandaran a quién poner, sino que además tenían todos los privilegios. Ellos decían al gobierno que les sostenían el presupuesto, pero a qué costa. A cosa de que los pequeños negocios, las personas con actividad empresarial, les mantuvieran menos deducciones, y por ende, pagar más impuestos”, explicó.

Finalmente, el abogado advirtió a los empresarios que ahora el SAT es una dependencia mucho más dura en el cobro de impuestos, por lo que no presentar la declaración a tiempo, te hace candidato a ser fiscalizado.

“Es un SAT que no te deja ninguna oportunidad, porque se dieron cuenta de que no podían tener un ejército para notificar a la gente, y con el Buzón Tributario te encuentran hasta debajo de las piedras. Si no lo abres en 3 días, empiezan a correr los plazos. Se acabó la fiesta, pero también hay que saber cómo pagar impuestos. Si la gente no presenta su declaración anual a tiempo, son candidatos a ser fiscalizados”, concluyó en la entrevista. 

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