Padre Camacho "pone plana" a chismosos para que dejen el "deporte del chisme"

A escribir mil veces "no debo hablar mal de mi hermano"

Padre Camacho "pone plana" a chismosos para que dejen el "deporte del chisme"

A escribir mil veces "no debo hablar mal de mi hermano", recomendó el padre Miguel Ángel Camacho a todas las personas a las que les gusta el chisme.

Durante su homilía de este domingo, en la que reflexionó sobre el Evangelio de San Lucas, señaló que, en este pasaje, Jesús nos enseña que un ciego no puede guiar a otro ciego, que no veamos la paja en el ojo ajeno, que cada árbol se conoce por sus frutos y que la boca habla de lo que está lleno el corazón.

En este sentido, refirió que hay muchas personas a las que les encanta ´meterse´ en la vida de los demás, que llevan y traen, sin saber que pueden causar división, divorcio, lastimar a alguien, provocar venganzas e incluso la muerte.

"Yo te lo propongo, si eres muy chismoso, quieres la solución para que se te quite lo chismoso, te voy a dejar, consíguete una libreta grandota y vas a hacer una plana, así como en la escuela, cuando escribíamos una mala palabra y luego ya no volvías a cometer el error, no debo hablar mal de mi hermano, hazla mil veces, y te aseguro que jamás en tu vida, vas a volver a hablar mal de alguien", dijo.

El "padre tiktokero", párroco del Santuario de Nuestra Señora de la Asunción en Cupilco, señaló que hay quienes agarran el chisme como deporte, lo que, según él, son personas que no andan bien y solamente buscan hacerle daño a los demás.

"Por qué quieres sacar la paja en el ojo de tu hermano y no ves la viga que llevas en el tuyo, porque una de las cosas que nos gusta al ser humano, nos encanta meternos en la vida de todo mundo, pero no revisas la tuya, que no creo que sea tan buena hermanito, por eso tiene toda la razón el Señor, ¿Por qué andas queriendo sacarle la paja a tu hermano, cuando tú eres un gran sinvergüenza?", agregó.

Finalmente, comentó que cuando alguien fallece se le "abre" los ojos a los demás y empiezan a decir que era buena, sin embargo, en vida hablaban mal de ese ser humano.

"Hay personas que, en un funeral, como que abren los ojos: por qué no me di cuenta nunca de esta gran persona, siempre lo juzgué, siempre lo traté mal, y ya cuando se viene a morir, ahí si, como que los ojos se te abrieron, porque es cierto hermanito, cuando muere alguien, a todo mundo se nos abre los ojos, cuando estaba vivo, era el más malo que había", apuntó.