Pandemia y salud de su hijo la motivaron a emprender: Caro Díaz

La pandemia del COVID-19 fue un momento difícil, ya que algunos se quedaron sin trabajo, pero fue también una oportunidad para emprender, sobre todo para varias mujeres, como fue el caso de Carolina Díaz.

Comentó que tanto la pandemia como los problemas de salud que enfrentó su hijo menor, le abrieron un panorama para iniciar su negocio, "con la confianza puesta en Dios", el cual comenzó con venta de accesorios para niños.

"Durante la pandemia yo me quedé inactiva, tuve que dejar de trabajar para cuidar a mis hijos, en ese lapso, mi bebé, el más pequeño, enfermó, tuvo problemas serios de salud y yo sin ingresos, empecé a buscar una fuente, algo que me ayudará a generar recursos y ayudar en la economía de la familia. Como yo tenía que viajar constantemente a la Ciudad de México para los tratamientos de mi hijo, yo acá encontré la forma de adquirir artículos, principalmente me refiero a lo que fueron accesorios para niños y niñas, llámese moños, collarcitos, gorritas, lentes", narró.

Indicó que la venta de estos accesorios rebasó las expectativas, y sus clientas iniciales, empezaron a demandarle productos para mujeres, y fue cuando surgió la idea de una tienda de regalos.

"El asunto fue que se rebasó mi expectativa, al grado que yo ya no podía cubrir las demandas de mis clientas, entonces me vi obligada a regresar a la Ciudad de México y hacer una compra mayor, expandir lo que ya mis clientas me estaban requiriendo, porque ya no se trataba de lo que yo les quería ofrecer, sino de lo que ellas querían comprar, entonces ya me llamaba, me mandaba mensajes, me decían que si cuando viajaba, que necesitaban algo para sus hijos, y se me prendió la chispa y dije: una tienda de regalos, ya no me dedicaba yo nada más a las chacharitas, si no que necesitaba una tienda de regalos, pero no contaba con el espacio físico, entonces tuve que invadir parte de mi sala de mi casa y me instalé allí", agregó.

Dijo que después vino la demanda de productos para caballeros, y lo que empezó con venta de accesorios para menores de edad, se comenzaba a expandir, al grado de vender su coche para conseguir un espacio más grande para su emprendimiento llamado "Caro Díaz".

"Posteriormente vienen los pedidos para los caballeros, yo ya no cabía en mi sala, y fue cuando le dije a mi esposo:  necesitamos un espacio más grande, tuvimos que vender incluso nuestro carro que era un apoyo bastante fuerte, porque tú sabes que sin vehículo ahorita, pues es muy difícil moverte, es una necesidad, pero necesitábamos sustituir esa necesidad por una más grande, entonces vendimos nuestro auto y pudimos adquirir, de eso te hablo en el lapso de un año, pudimos adquirir un espacio físico en el que yo ya me pude instalar en un espacio un poquito más grande", señaló.

Una vez instalada en su local, ubicado en la ranchería Corregidora del municipio de Centro, pensó que había concretado su proyecto, sin embargo, a petición de una clienta, también incursionó en las decoraciones de fiestas.

"Se me aparece otra clienta y me dice: ¿sabes qué? tengo un evento, ¿por qué no me lo decoras? yo no tenía experiencia en decoración de eventos, pero sí sabía todo lo que estaba relacionado con las manualidades, porque cuando yo estaba en la preparatoria, estudié un año y medio un curso de manualidades, pero nunca lo había ejercido, digamos así, nunca había hecho uso de lo que yo sabía hacer, no había tenido necesidad, pero para poder entrar a una decoración de una fiesta yo necesitaba capacitarme, entonces empecé a redoblar esfuerzo, a sacar de donde no tenía, y seguir ahorrando peso por peso para pagarme esos cursos, que son bastante caros. Cuando por fin logré obtener un ingreso extra con el que ya me podía pagar el taller, no lo pensé, llega una empresa a Villahermosa, de la ciudad de Veracruz, me registré sin dudarlo, y empecé a tomar cursos profesionales con ellos", describió.

Subrayó que no ha sido nada fácil haber emprendido, pero destacó que ha tenido el apoyo completo de su esposo, e incluso, hasta de sus hijos, quienes han comprendido algunas ausencias.

"Pero no ha sido así de la noche a la mañana, tan fácil, mis hijos, yo, mi esposo, hemos tenido que sustituir fiestas de cumpleaños, salidas al cine, salidas restaurantes, gastos que nos impidan seguir invirtiendo a nuestro proyecto. Mis hijos saben que estamos pasando situaciones difíciles, pero que todo es con un objetivo, por una sola causa, lo estamos logrando, sí, nosotros ahorita el poco recurso extra que nos queda, es para cubrir necesidades básicas, salud, alimentación, escuela, vestido, no te voy a negar que sí de repente nos damos una escapadita, pero la prioridad ahorita es nuestro negocio, tiene que crecer, incluso los niños siendo tan pequeños, ellos son tan conscientes, ellos también se han fajado el cinturón", indicó.

Abundó que para poder adquirir mobiliario infantil y familiar para eventos, tuvo que recurrir a créditos, e incluso, dijo que su esposo, de sus ingresos, también aporta para el crecimiento del negocio.

Señaló que actualmente cuenta con una cartera de clientes, sin embargo, sostuvo que hay días en los que en lugar de ganancias, ha tenido pérdidas, pero eso no la ha desanimado.

"No siempre todo es ganancia, a habido pérdida, sí, han habido clientes malos, sí, han habido ideas que no han progresado sí, si las ha habido, pero han sido cosas mínimas. Te puedo asegurar que el emprendimiento es algo tan difícil, tan complicado, mis lágrimas me han costado, días sin dormir, estrés, muchísimo estrés, preocupación, miedo, porque el poco recurso que tiene lo tienes que invertir, lo tienes que arriesgar, pero el miedo a mí no me ha impedido avanzar, siempre he tenido gente que ha estado impulsando, y también sé hacia dónde voy y hacia atrás no voy a regresar", enfatizó.

Además, admitió que sintió miedo de emprender, en primera, por los casos de fracaso que le ha tocado ver en otras personas, y en segunda, porque toda su vida había sido trabajadora de la iniciativa privada.

"Sí lo sentí, porque a mí me ha tocado ver gente que ha emprendido y que no ha logrado avanzar, que se ha estancado, que ha perdido todo lo que ha invertido, y ese era mi miedo, ese siempre ha sido mi temor, porque lo he visto, he conocido gente que ha fracasado y no tienen el valor de levantarse y seguir. Lo pensé muchísimo, pero además porque laboralmente, yo nunca me había dedicado a algo de manera personal o particular, yo siempre había trabajado en el servicio privado y una que otra vez en el servicio público, entonces yo tuve miedo, no sabía por dónde empezar - ¿Y anteriormente no habías tenido esa idea de emprender? – No, yo estaba enfocada en mi carrera, en lo que yo estudié, en lo que siempre había trabajado, yo no me veía como una emprendedora, jamás me pasó por la mente", refirió.

Por último, exhortó a las personas a emprender, a perder el miedo, y a quienes están ya en esta actividad, a no desanimarse, porque dijo, entre todos deben ayudarse para mejorar la economía.

"El que lo está pensando, yo le recomiendo que deje de pensarlo y que actúe, que lo haga. Quien ya está en el emprendimiento, que no se raje, que hay días buenos y hay días malos, pero también hay días muy, muy buenos, buenísimos, muchos más de esos, pero además el miedo no nos va a llevar a nada y que en esta vida se gana y se pierde, quien ya está, que siga empujando porque yo me he dado cuenta que, yo así con este pequeño emprendimiento, no solamente me estoy beneficiando yo y mis hijos, ya tengo por temporada estudiantes que trabajan conmigo, por ejemplo, ahorita en diciembre yo ya puedo generar empleos para jóvenes que están trabajando y que quieren obtener un ingreso extra en fines de semanas, por ejemplo, yo estoy generando ese beneficio a una o dos personas más", manifestó.