Investigadores tabasqueños buscan salvar orquídeas de la extinción

Por ello, investigadores del Colegio de Postgraduados campus Tabasco desarrollan tecnología para incrementar la tasa de multiplicación de brotes, en particular de dos especies. 

“Imagínate obtener mayor cantidad de plantas que pueden ser en menor tiempo, espacio y la cantidad de la plántula y poder ayudar a regenerar las áreas despobladas o desabastecidas por lo que ha hecho el hombre, por el saqueo”, comentó la investigadora Nydia del Rivero Bautista.

Desde hace más de un año, el estudiante Víctor Hugo Romano Ávila y otros investigadores buscan estrategias para contrarrestar el estatus de peligro de extinción en el que se encuentran las orquídeas. 

“Con nuestra investigación quisiéramos hacer frente a estas problemáticas, tenemos algunos alcances que nos hemos propuesto, a corto plazo esperamos contar con un protocolo de micropopagación para las especies Laelia que se pueda replicar y de esta manera resarcir los daños de la fragmentación de su hábitat.

“A largo plazo buscamos también que siga un escalamiento comercial, donde no exista o se recurra a la extracción de las especies de su hábitat y obviamente mediante programas de repoblación”, puntualizó.

El ingeniero en agrotecnología, quien actualmente cursa la maestría en producción agroalimentaria en el trópico, detalló que a través del uso de diodos emisores de luz led, pretenden elaborar un protocolo de micropropagación vegetal que sea transferible y permita fomentar la conservación de la especie.

“Todo inicia con algunas etapas que son esenciales para la reproducción, lo que llamamos una reproducción asexual porque una reproducción sexual sería la polinización, nosotros inducimos esa reproducción con partes de una planta, podría ser una hoja, un tallo o un brote, con esa pequeña cantidad de material vegetal nosotros podemos empezar a trabajar”, dijo.

Por su parte, el investigador Ángel Sol señaló que en las orquídeas el éxito de ser fecundadas es demasiado bajo o nulo, lo cual repercute en su conservación, reforestación y comercio.

Puntualizó que estas plantas en condiciones naturales no germinan tan fácilmente. 

“Para el caso de especies de tipo anual, como en este caso son las orquídeas los resultados son en corto tiempo, hablamos que cinco años, por ejemplo, ya se tiene una investigación bien definida, en cuanto a qué se debe abordar y qué no se debe abordar, ya tendríamos éxito porque al ser especies anuales en un año ya tendríamos un individuo producido en laboratorio floreciendo, digamos, en condiciones naturales”, expuso.

Con esta investigación se proyecta a largo plazo cómo podría ser el comportamiento de la planta de forma natural, porque al producirlo en laboratorio se evita la extracción del medio. 

Es así como estos investigadores buscan aportar su granito de arena en la preservación de esta popular planta.