Tomás Zerón se robó mil mdp como pago por entramado de “la verdad histórica”: FGR
La Fiscalía General de la República (FGR), acusó que Tomas Zerón, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal, se robó mil millones de pesos del presupuesto de la extinta PGR, como pago por el entramado de “la verdad histórica” y el encubrimiento de los responsables del caso Ayotzinapa.
El fiscal, Alejandro Gertz Manero, presentó ayer el informe institucional sobre el caso Ayotzinapa, donde señaló que en dicho robo, Zerón contó con la protección de la entonces PGR, pues pusieron a su disposición cerca de 50 agentes policiacos y todo el aparato administrativo para cuidarlo y facilitarle el saqueo.
“El titular de la Agencia de Investigación Criminal de la Procuraduría General de la República, se convirtió en el vocero oficial del Gobierno Federal y el principal orquestador de toda esta mentira, y de esas falsedades, llevando diligencias absolutamente reprobables, sin ningún control legal, hoy es importante destacar que los delitos cometidos por ese individuo que ahora huye a salto de mata por las órdenes de aprehensión que hemos logrado, no lo hizo gratuitamente, él tuvo un pago, él cobró y se robó más de mil millones de pesos del presupuesto de la entonces, Procuraduría General de la República que sustrajo con varios cómplices de manera fraudulenta dentro de la institución y con la anuencia de sus superiores”, asentó.
Gertz Manero, indicó, que en la secuencia cronológica del caso, el Ejecutivo Federal para ocultar y encubrir sus colusiones, primero acusó a las autoridades locales, pero como no le dio el resultado que esperaba tuvo que asumir el control y la responsabilidad del caso, de esa manera, dijo, “el Gobierno de la República se convirtió en el operador de un encubrimiento generalizado”.
“En este asunto ya no cabe la menor duda de que el Gobierno anterior, en todas sus instancias, desde la cúspide del poder hasta los operadores más elementales encubrieron, mintieron, torturaron, realizaron falsas diligencias y trataron de ocultar con impunidad y con escandalo mediático una trama que ahora se ha logrado exhibir con toda su crudeza y realidad, los jóvenes desaparecidos fueron víctimas que quedaron en medio de un choque de intereses de las fuerzas del narcotráfico que han estado asentadas en la ciudad de Iguala (Guerrero), por ser esta un centro neurálgico de distribución de la droga que se produce en la sierra de Guerrero y que es vital para quienes comercian con ella hacia los Estados Unidos”, expuso.
El fiscal, agregó, que la presencia de los estudiantes fue un “coincidente letal” en un momento de choque entre grupos delincuenciales, sus encubridores y su socio, enquistados en las policías local, federal, distintos organismos y fuerzas del estado mexicano que tenían sede en ese lugar.
Por último, detalló, que lo anterior, queda exhibido con la matanza de 80 personas que ocurrió en forma simultanea con la desaparición de los normalistas, y que fueron ocultadas en Iguala por diferentes grupos delictivos y sus cómplices oficiales, “en esa lucha feroz entre criminales y encubridores burocráticos, a los que no se les dieron seguimiento alguno por las autoridades competentes”, concluyó.