Se cumplen 10 años de la última gran inundación de Villahermosa

Las pérdidas ascendieron a casi 32 mmdp

Se cumplen 10 años de la última gran inundación de Villahermosa


Han pasado ya 10 años de la última gran inundación de Villahermosa, aquella que reportó pérdidas calculadas por 31 mil 871 millones de pesos y el 75 por ciento de su población damnificada, según informó en aquel entonces el ex gobernador Andrés Granier Melo.


¡No va a llegar el agua!, ¡Siempre llueve!, eran algunas de las expresiones de los Villahermosinos tras dejar sin validez las advertencias del ex mandatario sobre la presencia de un nuevo frente frío y la declaratoria de estado de emergencia de aquel 27 de octubre del 2007.





“Nos ha informado la Conagua que en las próximas horas llegará a tierras tabasqueñas un frente frío que traerá nuevamente a nuestro estado lluvias intensas, oleaje y vientos de 80 a 100 kilómetros por hora, esto nos hace tomar la decisión de declarar a Tabasco en estado de emergencia”, informó en cadena estatal el ex mandatario.

Las lluvias intensas en Tabasco y Chiapas se reflejaron rápidamente sobre los afluentes tabasqueños, que pronto superaron sus niveles máximos.



Las siguientes horas después de la alerta fueron cruciales; Elementos del Ejército Mexicano, personal de Protección Civil y ciudadanos se unieron para comenzar a colocar la costalería en el Malecón Carlos A. Madrazo para evitar que el agua se filtrara hacía el corazón comercial, económico y cultural de Villahermosa.

¡Corran se desbordó el río! Corrían despavoridas algunas personas alarmadas sobre la Avenida Méndez desde el Malecón hacía la calle Madero tras ver la fuerza y el nivel del Río Grijalva.



Lo inevitable sucedió. Muchas personas vieron con tristeza como el agua “devoraba” poco a poco sus hogares, sin respetar aquella pequeña muralla de costalería que habían colocado en las puertas de sus casas.

La catástrofe llegó a lo inimaginable, ya no valía la pena intentar proteger la ciudad con costalería, la prioridad era salir de sus casas, subir las pertenencias a la planta alta y atrincherarse ahí por el temor de los saqueos.

Según el ex gobernador Granier las pérdidas en aquella ocasión fueron millonarias, de acuerdo los informes de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe y el Centro Nacional de Prevención de Desastres.



“En el 2007 Tabasco vivió lo que hasta ese entonces fue la peor catastrofe de su historia, ese año de acuerdo a la Cepal y el Cenapred los daños sumaron los 31 mil 780 millones de pesos”, informó un tiempo después del desastre Granier Melo.

Cómo olvidar las imágenes de personas saliendo de sus hogares con el agua hasta el pecho y sus pertenencias sobre la cabeza; o aquella escena de ciudadanos parados sobre la avenida Pagés Llergo y viendo con preocupación una extensión del Río Grijalva sobre la avenida Méndez, una de las más importantes del estado.

Para cuando el agua descendió, regresar a casa, limpiar el lodo de los hogares, comercios, museos e instituciones era la menor de las preocupaciones de los villahermosinos, pues lo habían perdido todo. La desesperación era mucha a pesar de aquel anuncio del ex presidente Felipe Calderón quien ya pregonaba el “vamos a reconstruir Tabasco, cueste lo que cueste" así como el respaldo total a la entidad.



“Las lluvias torrenciales de los últimos días han causado inundaciones en la mayor parte de la entidad, ello a dejado a miles de personas damnificadas, muchos tabasqueños han perdido su hogar, sus pertenencias, sus cultivos, los medios para mantener a sus hijos. Otros más aún están en sus casas pero sin acceso a alimentos, agua o medicina; la situación es extraordinariamente grave, es uno de los peores desastres naturales en la historia del país, yo le pido a los tabasqueños que guarden la calma, que no se desalientes, que se coordinen con sus vecinos y autoridades, ya estamos trabajando para auxiliarlos en estos momentos difíciles al máximo de nuestra capacidad”, lanzó un comunicado en cadena nacional el ex presidente Felipe Calderón durante la contingencia.



Aún está en el recuerdo de los villahermosinos aquellas largas filas afuera de la Quinta Grijalva para poder acceder a una despensa, las escuelas usadas como albergues y como olvidar aquellas colchonetas, que para muchos, era lo único que les quedaba.

Nunca se olvidará aquella muralla de costalería en el Malecón que quedó resguardando la ciudad por mucho tiempo y que posteriormente dio pasó a esa gran muralla que realizó Conagua.

“Si ustedes ven la capital de nuestro estado ya está bastante recuperada a excepción de la costalería que se ve en los malecones, que no se puede retirar porque ese río que baja y pasa por el centro de Villahermosa no tiene control de presa, eso hace que sus caudales bajen libremente”, expresó el ex mandatario estatal un par de meses después del desastre.



A pesar de que ha pasado una década el recuerdo vive con mayor intensidad en el 75 por ciento de la población de 679 localidades en los 17 municipios que resultó damnificada por esa inundación que cubrió 62 por ciento del territorio tabasqueño. Short Link: http://bit.ly/2y8xhTv