Reviven "los serenos" en Tabasco, una actividad que se perdió en 1970

En la actualidad todos hemos visto a un vigilante o también conocido como guardia de seguridad patrullando por las calles, andadores o callejones de algún fraccionamiento o colonia, pero en el siglo XVIII existía otro personaje que ha sido retomados, los llamados serenos. 

Vicente García Padrón, quien es presidente del comité de vecinos del Fraccionamiento El Country, contó que en este conjunto habitacional tomaron la decisión de revivir a este tipo de guardias, quienes además de vigilar, también se acreditaban otras responsabilidades como ayudar a la ciudadanía, encender las luces, despertar a los vecinos que así lo solicitaron o incluso dar aviso a las autoridades en caso de observar alguna anomalía. 

“El sereno surge porque se quedan desempleados un grupo que manejaba estos juegos pirotécnicos, los quita la autoridad de esa población y esa gente que queda desempleada les dan ese oficio del sereno, de ahí viene ellos que además de darte cada hora, que además te daban el estado del tiempo, te decían las 11 y sereno o la una y está lloviendo, servían como, te daban el estado del tiempo, te daban la hora, te cuidaban y claro la gente les invitaba el café, les invitaba la torta, les invitaba el taco entonces en la década, esto surge en el siglo XVIII pero ya la década de 1970 fueron los últimos serenos en México”, destacó. 

Dijo que esto fue retomado en España, específicamente en Gijón, pero ahora de manera más moderna, con linternas, acceso a los switchs de energía eléctrica, teléfono celular, un silbato y justo así se retomó en Tabasco. 

“Hay vecinos que de pronto llegan a y a lo mejor enfiestados y dejan su camioneta, se ha dado muchas veces el caso, dejan su camioneta encendida o una puerta de su camioneta abierta o el portón de su casa abierta, entonces el sereno va, les marca a su domicilio para que ellos vayan y cierren su camioneta o apaguen su coche o a veces dejan las luces encendidas, entonces esa es la función de ellos”, destacó. 

Y es que resaltó que este es un modelo amigable para la vigilancia de las colonias y fraccionamientos, el cual se podría replicar en diversas partes de Villahermosa y por qué no, también del estado. 

“Igual y puede replicarse que sería muy bueno porque al final del camino estaría muy bien, generar esa empatía entre la gente que nos cuida, nos vigila, que conozca su nombre, que sepa quien es y que se sientan seguros, porque también van recorriendo y lamparean las colindancias con otras fraccionamiento y si ven alguna anomalía que si ven alguna concertina mal acomodada o que se encuentran con una fuga de agua o que se encuentran con un bache o con una guarnición quebrada ellos van y lo reportan para que al día siguiente la oficina de la administración tome cartas en el asunto y se pueda atender”, dijo. 

De aquí es donde surgen los guardias de seguridad pero ahora de nueva cuenta están reviviendo los serenos, un oficio que se encontraba extinto.