Nuevo consejo de Morena no está dividido por afines a Adán Augusto y Javier May: Raúl Ojeda
El morenista descarta algún riesgo de ruptura con miras al 2024
“Si empezamos con exclusiones o señalamientos de que ‘tú si y yo no’, difícilmente podemos buscar refrendar lo que hasta ahora tenemos, tanto en el ámbito nacional como en el ámbito estatal, que es la conducción de los destinos del país y de Tabasco por alguien que esté plenamente convencido de los ideales de la 4T", externó.
"Tuvimos discrepancias, enterrémoslo, porque no hay manera de avanzar, si se quiere construir en unidad, si arrastramos todavía un proceso que todos vivimos y no lo hemos superado”
El también delegado presidente del Comité Ejecutivo Estatal del partido guinda en Morelos señaló que ve en los 60 nuevos consejeros condiciones favorables para que “la ola del lopezobradorismo” continúe en México y en el estado, y descartó algún riesgo de ruptura, con miras al proceso de selección de los abanderados.
“Al final de cuentas va imperar el modelo que ya tanto el presidente de la República impulsa, como la dirigencia del partido ya determinó, que ese va a ser el modelo, que es el de las encuestas, así que ni me pongo a nadar en el río Tepetitán, ni me pase enfrente de la casa de nadie, ni bateo de 400 en el parque de los Guacamayos en Palenque, ni hago malabar y medio para significarme, ni me exhibo, ni trato de impresionar con el manejo mediático, porque eso no va a ser de utilidad si no estás identificado con la gente”, asentó.
Abundó que en Tabasco todos se identifican con el “lopezobradorismo” y que la ciudadanía visualiza quiénes tienen el equilibrio y madurez para que, en el ánimo de construir una gran alianza entre todos los que simpatizan con este causa, pueda representarla en las urnas.
“Quien esté interesado y ya lo haya demostrado, es legítimo, pero al final de cuentas nada de lo que hagan o dejen de hacer les va ser útil, si los ciudadanos opinan lo contrario”, aseveró.
Por lo anterior, Ojeda Zubieta sugirió a los aspirantes de su partido a una candidatura, dejar que el gobernador y los ediles hagan su trabajo, para que sus pretensiones políticas no desconcentren a los ciudadanos.