Fiscalía de la CDMX abre investigación contra alcaldesa por presunta agresión a dos policías

La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) anunció que inició una investigación en contra de la alcaldesa de Cuauhtémoc, Sandra Cuevas, por la presunta comisión de los delitos de privación de la libertad, abuso de autoridad y robo en contra de dos policías.

En un video difundido en las redes sociales de la fiscalía, el vocero de la institución, Ulises Lara, señaló que la titular de la alcaldía Cuauhtémoc supuestamente habría retenido y agredido física y verbalmente en sus oficinas a dos mandos de la Policía Auxiliar, luego de una diferencia surgida en el trabajo para reordenar el comercio informal en la colonia Centro. 

“Se inició una investigación tras la denuncia presentada por dos mandos de la Policía Auxiliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, en contra de la servidora pública, titular de la alcaldía Cuauhtémoc (Sandra Cuevas), por el delito de privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad, robo y lo que resulte…”, expuso.

Dijo que ambos agentes fueron convocados para atender una reunión con la servidora pública Sandra Cuevas, con el argumento de dialogar y trabajar en la ampliación del servicio de vigilancia.

Detalló que de acuerdo con las primeras indagatorias en el sitio, en la oficina donde despacha la alcaldesa, se encontraban la titular de la demarcación y varias personas más, entre ellas la directora de Mercados y Vías Públicas, así como el director general de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, de los cuales se omitió el nombre.

“Tras las entrevistas rendidas por los afectados, quedó asentado en la indagatoria que ambos uniformados fueron agredidos tanto verbal como físicamente en repetidas ocasiones por la titular de la alcaldía, así como por varios hombres que ahí se encontraban…”, señaló.

Finalmente, Ulises Lara apuntó que es responsabilidad del Estado el mantenimiento de la paz y la persecución de los delitos, por lo que la solución de los conflictos debe darse mediante el diálogo y la construcción de acuerdos de la población y otras autoridades, y no a través del uso de la violencia, ya sea física o verbal.