“Las empresas del Estado son el cáncer del país”, sostiene Rodríguez Prats ante política de AMLO de cerrarse a la inversión extranjera

El analista político, Juan José Rodríguez Prats, difirió de la política energética del presidente Andrés Manuel López Obrador, que pretende dar preferencia a las empresas del Estado como Pemex y CFE, antes que a la inversión extranjera.

Y es que alertó que este esquema dio mucho que desear en el pasado, y que incluso generó una pérdida económica cuantiosa. 

Lamentó que en el gobierno federal haya una contradicción entre lo que piensa el mandatario federal sobre la inversión extranjera, y lo que opinan sus funcionarios.

“El Estado mexicano como empresario fue un gran fracaso. El sector paraestatal, la empresa pública, incurrió en terrible pérdida que pagamos los mexicanos por varias décadas. Retornar a estos esquemas me parece sumamente peligroso. Y aquí hay una incongruencia entre lo que dice el señor presidente, frente a lo que ha declarado Alfonso Romo, que habla de que el 87% es inversión privada en la economía, y que es necesario estimular, dar garantías, porque es lo único que nos puede permitir enfrentar la crisis, dada la enorme astringencia que tiene la inversión pública y que va a tener. Por otra parte, el mismo Arturo Herrera también lo señala”, dijo. 

Rodríguez Prats, señaló que las empresas del Estado han demostrado su incompetencia y altos niveles de corrupción, y que solo han dejado una mala impresión de México ante los organismos económicos nacionales e internacionales. 

“Entonces por qué meterse a áreas donde se ha demostrado reiteradamente su incompetencia, los altísimos niveles de corrupción, la empleomanía, el ceder a los sindicatos, el designar gente que no es idónea, todo esto es lo que hizo que muchas instituciones como las calificadoras, el Banco de México, la Banca Mexicana, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, inclusive el exvicegobernador del Banco de México, Jonathan Heath, que fue una propuesta del presidente López Obrador, llegó a decir que Pemex es el dolor de cabeza del Estado mexicano, que puede convertirse en una migraña o en un tumor canceroso”, expuso.