Comunidad médica exige seguridad al Gobierno de México, luego del asesinato de un pasante en Durango

Luego del asesinato de un pasante al interior de un hospital comunitario en Durango, la Comunidad Médica exigió al Gobierno de México garantías de seguridad para sacerdotes, maestros, enfermeras y personal sanitario que presta sus servicios en comunidades rurales.

La tarde del viernes, Erick David Andrade Ramírez, de 24 años de edad, médico pasante en el Hospital Integral de El Salto, en Pueblo Nuevo, Durango, fue asesinado de varios impactos de bala, por el acompañante de un paciente que atendía al interior del nosocomio.

Ante lo cual, 54 Federaciones, Sociedades y Colegios Médicos de México, dirigieron un escrito al presidente Andrés Manuel López Obrador y al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, para manifestar su protesta en contra de la inseguridad que sufren, no solo los habitantes, sino también el personal sanitario que labora o realiza su servicio social en ciertas zonas del país.

Asimismo, expresaron su indignación y condena por el “inaceptable” asesinato del médico Erick David Andrade.

“Ninguna muerte por violencia se justifica, pero al ser dirigida contra quienes, por su vocación se dedican a mejorar y salvar la vida de los demás, es mayormente condenable”, expusieron en el documento.

Además, afirmaron que los trabajadores de la salud se sienten vulnerables, por lo que al igual que en otros crímenes contra el gremio, exigieron el esclarecimiento de dicho asesinato y el castigo contra los responsables.

“Seguimos solicitando al Estado garantía en la seguridad para sacerdotes, maestros, enfermeras, médicos, y en general, todas las personas que tienen que acudir a laborar en esas zonas, siendo una de las razones por las que la mayoría de los médicos no aceptan laborar en dichas áreas”, enfatizaron.