EPN el peor presidente de México y AMLO el mejor, según encuesta publicada por el diario español El País

El diario español El País publicó una encuesta donde evalúa la calificación de los mexicanos respecto a los últimos tres presidentes de la República que han tenido.

Según la publicación, Enrique Peña Nieto es considerado como el peor, mientras que Andrés Manuel López Obrador sale, de forma abrumadora, como el mejor.

A la pregunta expuesta por el rotativo “de los tres últimos presidentes, quién considera que ha sido el peor”, Felipe Calderón aparece con un 20 por ciento; Enrique Peña Nieto con el 52 por ciento; y Andrés Manuel López Obrador con un 16 por ciento.

Mientras, en el cuestionamiento de “el mejor”, Calderón tiene un 13 por ciento; Peña un 10 por ciento; y Obrador el 56 por ciento.

En ese sentido, El País especifica que en la consulta, de SIMO Consulting, se refleja que los mexicanos están, “en efecto, divididos en bloques. Un 49 por ciento de los encuestados declara que votará por los liberales, mientras que aproximadamente la mitad, un 25 por ciento, apoyaría a un bloque conservador”.

El País afirma que “la mitad contra el ex presidente Enrique Peña Nieto, quien llegó al poder con un aura de cambio y juventud institucionalista, pero que abandonó el cargo con uno de los niveles más bajos de aprobación que recordaba la oficina presidencial. Y también la mitad a favor de López Obrador. Si al primero un 52 por ciento le considera el peor del os últimos tres mandatarios, al segundo un 56 por ciento lo ve como el mejor”.

Por lo que el diario español agrega que es probable que muchos mexicanos estén en ambas categorías, configurando una suerte de mitad polarizada en la contraposición Peña Nieto-López Obrador. “Es también forma parte del discurso político del mandatario, cuyo programa busca romper con las pasadas administraciones del PRI y del PAN, empezando por el Gobierno que le precedió”, señala la publicación.

Finalmente, El País dice que López Obrador aún no ha llegado al ecuador de su sexenio “y, más allá del programa de reformas, ya ha conseguido uno de los propósitos estructurales de su proyecto. Esto es, ser el eje polarizador de la vida política aun a riesgo de dividir a la sociedad”, apuntó.