Designación de Lenia Batres no es ilegal, pero muestra degradación política: Lorenzo Córdova

Lorenzo Córdova Vianello dijo que la designación de Lenia Batres como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no es ilegal, pero muestra la degradación política del país. 

En un video para Latinus, el consejero expresidente del INE indicó que el proceso de nombramiento está en la Constitución, pero que se debe cuestionar cuál es su sentido y replantearse, ya que permite abusos.

"La designación por debajo de Lenia Batres como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es un hecho inédito en la historia del país que, si bien no es ilegal, sí constituye el ejemplo de la degradación política que hemos alcanzado. La designación no es ilegal (...) El procedimiento descrito que está establecido en el artículo 96 de la Constitución es claro y es precisamente lo que ocurrió. Puede cuestionarse la idoneidad del mecanismo, de hecho, la misma Lenia Batres lo cuestionó, y con razón, hace más de una década cuando era diputada del PRD partido, por cierto, al que entonces pertenecía López Obrador, pero es una norma clara y que está establecida en nuestra Carta Magna. Sin embargo, hay que preguntarse cuál es el sentido de esa disposición que, vistos los abusos que permite, deberíamos por cierto replantearnos hacia el futuro", señaló. 

Córdova Vianello añadió que el proceso de designación de la nueva ministra muestra lo que ocurre cuando el presidente abusa de la lógica y no hace propuestas aceptables, que tiendan a propiciar un acuerdo básico, sino propuestas que de antemano se sabe que no tendrán los consensos mínimos necesarios. 

Asimismo, expuso que el procedimiento constitucional se cae a pedazos cuando lo que busca el mandatario federal es poner al Senado de la República "contra las cuerdas, buscando amagarlo y arrinconarlo, en lugar de buscar construir consensos". 

El expresidente del INE comentó que el "sentido común, la lógica democrática y la decencia son valores que no tienen cabida en la ecuación del agandalle" de la nueva integrante del máximo tribunal.

"El problema que hoy vimos con toda su crudeza es qué pasa cuando el Presidente abusa de esa lógica y no hace propuestas aceptables, que tiendan a propiciar un acuerdo básico, sino más bien propuestas que de antemano se sabe que no tendrán los consensos mínimos necesarios. Toda la lógica que supone el procedimiento constitucional se cae a pedazos cuando lo que el presidente se propone es colocar al Senado contra las cuerdas, buscando amagarlo y arrinconarlo, en lugar de buscar construir consensos, en vez de proponer perfiles que resulten aceptables para todos y que puedan propiciar esos acuerdos, se juega la imposición ´o nombran algunas de las que yo quiero o las nombro yo´. Poco cuenta el riesgo de la infamia de pasar a la historia como el primer presidente que utilizó el dedazo para nombrar a una jueza constitucional o, por parte de las aspirantes, de llegar al cargo con el estigma de no contar con una validación democrática en su origen. El sentido común, la lógica democrática y la decencia son valores que no tienen cabida en la ecuación del agandalle", refirió.

Finalmente, el exfuncionario consideró que más vale tener una Suprema Corte incompleta temporalmente, a tenerla permanentemente capturada políticamente por un Poder cuyos actos tiene por misión vigilar y controlar.