Canirac busca diferir pago de impuestos federales para resistir la pandemia
Los restauranteros buscarán que el Gobierno Federal otorgue una prórroga para el pago de impuestos, y así tener un respiro ante la afectación económica generada por la pandemia de COVID-19, adelantó el presidente nacional de la Canirac, Francisco Fernández.
En Telereportaje, el líder empresarial argumentó que, al final de la pandemia, cerca de 60 mil establecimientos tendrán que cerrar definitivamente sus puertas, debido a la quiebra a la que les llevarán las pérdidas económicas e incapacidad de pagos a proveedores y a empleados.
“En realidad la situación ha sido tremenda. Pensamos que va a haber una pérdida del 10% de este gremio. Sabremos la numerología cuando termine. Los restaurantes, como cualquier empresa, depende del crecimiento económico de los consumidores. Hubo una afectación real en los bolsillos de todos los mexicanos, directamente va a afectar a la actividad. Creo que la parte más afectada va a estar en el Centro. Creemos que el sector más afectado está entre 100 y 250 (del consumo por cliente), ahí calculamos que se vaya a perder el 10%, alrededor de 60 mil establecimientos”.
Explicó que en otros países, los gobiernos han optado por exentar a empresarios de impuestos y pagos de algunos servicios, para que no cierren sus puertas, y no dejen sin empleo a millones de trabajadores, por lo que Francisco Fernández lanzó un llamado a la administración lopezobradorista a que no les regale recursos, sino que les permita pagarlos en plazos diferidos.
“Lo que pedimos es que nos dieran tiempo, oxígeno, una prórroga en pago de impuestos, una ayuda en el tema de la luz, como en otros países. Si analizamos lo que hizo el Gobierno Federal con la iniciativa privada, es infinitamente menor a otros países. Pedimos que se nos dé tiempo de recuperarnos. No queremos que nos regalen, pero que nos den tiempo. Los bancos dieron 4 meses, yo hubiera esperado una actitud similar”.
Además, el líder de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados se refirió a las palabras del presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando comentó que “no van a haber rescates para potentados. Si hay una quiebra de una empresa, que sea el empresario el que asuma la responsabilidad (…) sin privilegios para nadie (…) es una inmoralidad utilizar al Estado para rescatar a empresas en quiebra”.
“Hay una frase que es muy dura, que el presidente comentó ‘que quiebre quien tenga que quebrar’. A mí me parece muy desafortunado porque eso nos lleva a un concepto del capital por encima de todo. Yo diría que no siguiéramos ese concepto. Las personas son más importantes que el capital. Tratemos de cuidar a nuestra gente al máximo. El ser solidarios con nuestra comunidad es importante, no únicamente pensemos en resultados financieros, y que no quiebre quien tenga que quebrar, y nos llevemos a todos de corbata. Eso sería entrar en un capital brutal que nadie quiere”.
Por ello, aconsejó al gremio restaurantero cuidar los recursos de sus empresas, no desperdiciando ni teniendo mermas que antes se permitieran; asimismo, sugirió reducir los menús, y no aumentar ni reducir precios.
“Es muy importante que evitemos el desperdicio, no nos podemos dar el lujo de gastar lo que no debamos. No veo la estrategia de subir precios, tampoco la de bajar los precios, porque esto obedece a la materia prima. Lo que sí podemos hacer es una reducción de nuestro menú para lograr la máxima eficiencia. El 20% del menú genera el 80% de la venta. Todo producto que no pueda garantizar la frescura, que no deba guardarse de un día para otros, hay que hacer una recomposición del menú”.
Francisco Fernández consideró que las medidas que tomen los restauranteros no deben ser iguales en un lugar que en otro, por cuestiones de culturales, económicas, climáticas, y de diversa índole, aunque sí pidió que se siga la estructura básica que permita garantizar la seguridad e higiene de los clientes, y evitar nuevos brotes en la reactivación.
“Nosotros como Canirac elaboramos un protocolo con Secretaría de Salud, que es finalmente el que se aprobó en conjunto con Turismo. Lo que ha sucedido es que cada estado debe hacer adecuaciones, pero digamos que la estructura está hecha por Canirac. Ha pasado que en esta realidad de que cada estado y municipio lo ajuste, inclusive lo hace más exigible. Además, el protocolo fue hecho considerando 32 protocolos de Estados Unidos y Europa, y tomando en cuenta la Norma Oficial Mexicana. - ¿Entonces las autoridades sí les están escuchando? – Claro que nos hicieron caso. Nosotros somos los expertos en la materia”.
El dirigente nacional de Canirac estimó, finalmente, que el sector restaurantero tardará al menos un año en regresar a la normalidad; mientras tanto, sólo tendrán un porcentaje limitado de las ventas que antes se tenían.
“Lo que requerimos es que haya mucha certidumbre. Después de ser un sector tan brutalmente afectado, lo que menos queremos es sumar complicaciones. Queremos mucha claridad y regresar lo más pronto posible a la normalidad. Vamos a tardar mucho, vamos a iniciar con el 40% de lo que estábamos acostumbrados. Esperamos que en diciembre lleguemos al 70% de las ventas. Eso significa que podemos tardar un año en regresar a la normalidad, y habrá que hacer reducción de todo”.