Afirma obispo de Chilpancingo ser víctima, pero rechaza presentar denuncias

El Obispo Emérito de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, rechazó presentar denuncias contra quienes supuestamente le hicieron daño y contra aquellos que lo revictimizaron.

En un comunicado, argumentó que tomó esa decisión en razón de que su vida, edad y salud "están en condiciones desfavorables" y al seguir "los principios evangélicos" de Jesucristo, "que perdonó a las personas que lo traicionaron, lo vendieron, lo juzgaron, lo torturaron y lo asesinaron". 

Asimismo, "después de haber hecho oración, meditado profundamente y de haber consultado" con sus "seres queridos, tanto del clero como laicos". 

Monseñor expresó: "con todo mi corazón, perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación". 

NO PRESENTARÁ DENUNCIAS

El párroco refirió que, en ejercicio de sus derechos constitucionales, no presentará ninguna denuncia contra las personas que "tanto mal" le han hecho.

Pidió a los medios de comunicación lo comprendan y respeten su decisión, la cual, sostuvo, está encaminada al bien de su seguridad e integridad física y moral.

El obispo emérito agradeció a las autoridades legales y eclesiásticas que han colaborado en este caso, y de manera especial a su abogado Luis Gasca; así como a quienes se han solidarizado con él, que hicieron oración por su vida y por su pronta recuperación.