México contrató vacunas de CanSino a través de empresa fantasma ventila Univisión

Según los expertos consultados por Univisión Investiga, conforme a los documentos en su poder, Latam Pharma, al momento de firmar el acuerdo con México, no contaba con registro comercial suizo, puesto que el acta de creación de la compañía es del 10 de diciembre de 2020, y su registro fue hasta el 22 del mismo mes, es decir, ambas fechas fueron posteriores a la firma del contrato.

Agrega la investigación, que de acuerdo al contrato entre Latam Pharma y el Gobierno de México, firmado bajo la jurisdicción de Singapur, la farmacéutica únicamente se encargaría del llenado y envasado de las vacunas, a través de filial en México, Drugmex, que es una empresa creada en julio de 2015, con una inversión de 10 millones de dólares y que funciona en un centro operativo en la ciudad de Querétaro, donde se hace el envasado de las dosis, y no en Suiza, como reza el contrato.

Aunado a lo anterior, Univisión Investiga destacó que Latam Pharma, se constituyó con un capital de aproximadamente 100 mil dólares, y que en 2020, pese a que fue creada en diciembre, declaró ganancias por cerca de 300 mil dólares.

De igual forma, apuntó que tanto Latam Pharma como la Secretaría de Salud de México, confirmaron que la empresa no estaba constituida en la fecha de la firma del acuerdo, pero la farmacéutica argumentó que no había ningún problema, dado que en Suiza, una compañía existe desde que se hace su acta de constitución.

Otro dato que resaltó la investigación, es que el abogado Luis Doporto, presidente del Consejo de Administración de Latam Pharma, nunca figuró públicamente en noticias sobre la vacunación masiva de CanSino en México, ni se mencionaba su participación en la misma, sino hasta que Univisión contactó con la farmacéutica, y horas más tarde, se publicó un artículo donde hacía referencia al abogado mexicano.

Finalmente, la investigación bastante amplia, también precisó que todo lo anterior pone en desventaja a México, dado que no se establecen responsabilidades para CanSino, en caso de problemas con la manufactura de las vacunas, además de que tampoco hay garantías de que los contratistas cumplan con sus obligaciones.