Denuncia HRW que bomba rusa mató a cuatro personas en hospital de Donetsk

Asimismo, compartió a través de sus redes sociales un video y fotografías enviadas directamente por trabajadores de la clínica tras el ataque, en donde se aprecia el daño a las instalaciones, a una ambulancia y a tres vehículos de civiles.

“Este insensible ataque ha matado y herido a civiles y dañado un hospital. Las fuerzas rusas deben dejar de usar municiones en racimo y poner fin a los ataques ilegales con armas que matan y mutilan indiscriminadamente”, dijo Steve Goose, director de armas de HRW.

Por su parte, la jefa médica del hospital, Natalia Sosyura, describió el ataque: “Estaba en el primer piso de nuestro edificio de dos pisos. Escuché una fuerte explosión afuera, corrimos hacia el pasillo. Por suerte, no tuvimos muchos pacientes. Eran alrededor de las 10:30 de la mañana. Todos caímos al suelo”, relató.

La organización recordó en un comunicado que, en un tratado internacional, se acordó la prohibición de las municiones en racimo debido a su efecto indiscriminado generalizado y al peligro duradero para los civiles. 

“Las municiones en racimo normalmente explotan en el aire y envían docenas, incluso cientos, de pequeñas bombas sobre un área del tamaño de un campo de fútbol. Las submuniciones de racimo a menudo no explotan en el impacto inicial, dejando restos que actúan como minas terrestres. Ni Rusia ni Ucrania se encuentran entre los 110 Estados parte del tratado de prohibición”, se lee en el documento.

Por último, la organización dio a conocer las identidades de las personas que perdieron la vida en la agresión por una presunta bomba rusa.

“Los civiles muertos en el ataque, dos hombres y dos mujeres, fueron Maksim Sidorenko, de 34 años; Antonina Sidorenko, 65; Sergei Sivukhin, 56; y Olga Shramko, de 50”, informó.