Madres de familia denuncian desalojo de jardín de niños en Cunduacán

Un grupo de madres de familia del jardín de niños “Benito Juárez García”, ubicado en la segunda sección de la ranchería Piedra, Cunduacán, piden la intervención de la Secretaría de Educación de Tabasco (SETAB) ante el aviso de desalojo que recibió el plantel educativo este martes.

Esbeydi Vicente Vicente, tesorera del plantel precisó que les entregaron un documento, donde les informan que tienen 30 días para desocupar el inmueble, pese a que desde hace 40 años la escuela cuenta con un título de donación del predio de casi 50 metros cuadrados.

Las madres inconformes, explicaron que un particular compró un terreno aledaño al jardín de niños y ahora se quiere apropiar también del predio donde se encuentra la escuela.

“El dilema ahorita de que, pues nos lo quieren quitar, que hay una orden donde ya nos quedan 30 días para desalojarlo, nosotros estamos peleando por ese derecho que es de los niños, no tenemos a donde más mandarlos y es lo que queremos, que Secretaría nos dé una respuesta de lo que vamos a hacer porque la directora de nuestro plantel, pues nos dice que ya está en manos de la secretaría, pero no vemos solución de nada. La opción que tienen es buscar un lugar a donde llevarlos, pero el temor de nosotras es ir a exponer a nuestros hijos a otro lado”, externó.

Por su parte, Oreana Suárez Custodio, una de las afectadas, explicó que hicieron una manifestación afuera de la escuela y temen llevar a sus hijos por el desalojo y por no saber qué pasará con su educación si se llega a cumplir esta orden.

“Pues la maestra nos dice que todavía van a darnos respuesta y así nos lleva. Exactamente, no hay que exponerlos, yo de mi parte no expongo a los míos porque no vayan a correr el riesgo de que lleguen a desalojar el kínder y a donde van a ir los niños. Nosotros pedimos hablar con el secretario de aquí, no pedimos, exigimos hablar con él”, solicitaron.

Expusieron que el kínder tiene alrededor de 45 años de haberse fundado, actualmente cuenta con más de 30 alumnos e incluso recibió recursos para su mantenimiento, por lo que acudieron a la SETAB para buscar una solución.