En misa de Domingo de ramos, llama Iglesia Católica a entregar a Dios preocupaciones y angustias
Celebración se realizó desde la catedral de Tabasco sin fieles
De forma inédita, sin la presencia de fieles, desde la catedral de Tabasco se celebró ayer la misa con motivo del Domingo de Ramos, que conmemora la entrada de Jesús a Jerusalén.
Con la asistencia de un grupo de sacerdotes, vestido de una túnica roja e implementando las medidas sanitarias ante la emergencia por el covid-19, el obispo de Tabasco, don Gerardo de Jesús Rojas, realizó la homilía que se efectúa cada año y que fue transmitida a través de Televisión Tabasqueña y compartida en redes sociales.
Durante la reflexión, Rojas López sostuvo que es momento de entregar a Dios preocupaciones y angustias por los problemas y situaciones difíciles que se enfrentan.
Tras ofrecer una oración por el pueblo de Tabasco, Monseñor pidió la intercesión de Cristo ante el golpe que está ocasionando esta enfermedad.
“Hoy estamos ante ti llenos de fe, pero atribulados por los peligros que nos acechan, el dolor y angustia de nuestras familias en todo Tabasco; al afrontar esta enfermedad de coronavirus reconocemos humildes y pecadores y acudimos a ti porque sabemos que eres nuestro único Salvador. Señor, tú eres nuestro refugio y fortaleza y tu infinita misericordia, a ella nos acogemos; ten compasión de tu pueblo que peregrina en Tabasco y que únicamente en ti pone su esperanza; nos sentimos como la imagen de tu hijo, Cristo Rey, señor de Tabasco, atados de pies y manos, con dolor y golpeados por esta enfermedad”, sostuvo.
A la entrada, el obispo llevó a cabo la bendición de las ramas e hizo una oración para los que desde casa siguieron la celebración.