Debaten activistas y Bienestar por “proyecto de rescate de la Laguna de las Ilusiones”

Celebraron que se esté actuando para salvar la laguna, sin embargo, coincidieron en que, de nada servirá si no se hace de la manera correcta

Activistas y especialistas de la Secretaría de Bienestar, Sustentabilidad y Cambio Climático del Estado, debatieron sobre el contenido y metodología del “Proyecto de rescate de La Laguna de las Ilusiones”.

En entrevista, para el programa “A Fondo con Chuy Sibilla”, desde el Vaso Cencali, los activistas Arístides Barreda Prats y Luis Renauld, celebraron que se esté actuando para salvar la laguna, sin embargo, coincidieron en que, de nada servirá si no se hace de la manera correcta.

“Desafortunadamente no conocemos o no conozco el proyecto en su fondo, solamente conocemos lo que las autoridades nos han estado diciendo durante algunas entrevistas que han estado haciendo y dando a conocer a la opinión pública…este tipo de equipos que están ocupando no es el indicado, pueden perforar la capa permeable de la laguna…”, indicó.

“Es importante cuando uno va hablar de un proyecto de dragado conocer la geología de la zona donde está ubicado el cuerpo de agua…ahorita se está excavando y encontramos una zona que no es un aluvión, sino que es una acumulación de arcilla sumamente dura que yo pensaría que son producto de la mezcla de materiales más parte de las cenizas del Chichonal que se mezclaron hace 40 años…entonces hablan sobre base de desconocimiento”, rebatió.

El especialista recomendó a Arístides Barreda que cuando vaya a hacer una crítica se documente para que esta sea válida y se pueda tomar en cuenta en el proyecto, pero no a partir de conceptos sustentados en leyendas urbanas.

Pues dijo, no se vale que con suposiciones intenten desacreditar un proyecto.

“Cuando se hizo la presentación del proyecto, él dijo que no iba a permitir que se metieran agua del río carrizal porque venían contaminados con metales pesados, -momento, yo no dije que no iba a permitir, dije que yo no lo aceptaba, que no era viable, no pongas palabras en mi boca-, dijo que el río Carrizal estaba contaminado con metales pesados, eso es ilógico, un río que corre con 300 mil litros por segundo, para presentar esos niveles de metales pesados tendría que estar minando en una fuente de metales brutal que no hay indicios…”, destacó.

Respecto al presunto estudio realizado por una Universidad de Chiapas, el subsecretario de Bienestar, Gary Arjona Rodríguez, realizó algunas precisiones.

“Las aseveraciones de Arístides en cuanto a su preocupación por que se va a dañar el fondo de la laguna rayan en una ocurrencia, y la verdad es que yo todo este tiempo me había mantenido al margen tratando de ser muy respetuoso de las diferentes expresiones de la ciudadanía y lo que sí, no puedo dejar pasar es el que mienta con total desfachatez, ahorita salió a relucir nuevamente su gran preocupación porque el río Carrizal tiene metales pesados… y nos manda este que es su fuente, nada más que no sé si no lo leyó, que es el río Carrizal pero de Manabi, que está en Ecuador…”, expuso. 

Por su parte, Barreda Prats, reconoció que pudo equivocarse al no revisar a detalle el origen del estudio, sin embargo, alegó que eso no desacredita todas las observaciones que ha realizado por lo que consideró ha generado la falta de transparencia en el Proyecto para el rescate de la Laguna y su ejecución.

“No es mi papel como se los dije al principio, yo estoy contento porque alguien después de muchos años un gobernador se preocupó por hacer algo por la Laguna, lo he dicho, lo he defendido, no sé en qué momento este señor Gary dice que estoy loco y que no lo estoy reconociendo… y le digo que sí que parte de lo que están haciendo está correcto, les hace falta quitar las descargas… y a lo mejor sí se me fue ese río que dice él, igual y sí me confundí, lo reconozco, pero que esté loco, no”, apuntó.

Finalmente, el activista Luis Renauld, ofreció al gobierno del Estado, su colaboración y puso a su disposición el proyecto que realizó junto a la Conagua para la eliminación de las descargas de aguas residuales que van a la Laguna de las Ilusiones.