Registra Tabasco 159 sismos de 1990 a la fecha

Ninguno ha superado la escala de los 5 grados

 

Aunque parezca increíble, de 1990 a la fecha, en Tabasco se han registrado 159 temblores en una magnitud de entre 3.3 y 4.8, mientras que en Chiapas han ocurrido 88, lo cual convierte al estado en una zona sísmica, reveló el geofísico, José Luis Hernández Dehesa.

 

 

Lo anterior, lo dio a conocer durante la conferencia magistral ‘La Incidencia Sísmica de Tabasco, su origen y las acciones de prevención y respuesta’, en donde sostuvo que siempre ha temblado en la entidad, solamente que antes, no eran tan perceptibles como ahora, con los avances tecnológicos.

 

 

 

 

“Ahora va la realidad de las cosas, tenemos cuatro vecinos sísmicos: Campeche, Chiapas, Oaxaca y Veracruz. Fíjense que curiosos son los datos, vean la cantidad de sismos, esto es para un lapso de 1990 a la fecha, sismos de cierta importancia. 159 sismos en Tabasco, nada más que son pequeños; no son pocos 159 sismos, es poco probable que exista uno grande, sí, aquí”, señaló.

 

 

 

 

“No se vayan con el engaño de la escala del sismo, de la magnitud, porque puede ser un sismo chiquito, que no pase de 5, de los 4.8, pero que esté a 10 kilómetros de profundidad, eso no es nada, el impacto va a ser muy fuerte, porque estamos recibiendo toda esa inmensidad de energía arriba, de cerquita. Qué pasa si el sismo está a unos 40 o 50 kilómetros de profundidad, de ese mismo tamaño, pues se va disipando”, explicó.

 

 

El especialista refirió que en el caso de Villahermosa, en la zona de Tabasco de 2000, son más perceptibles los temblores, por el tipo de suelo.

 

 

Además, indicó que los sismos intensos que se han sentido en la entidad, es porque se han originado en Chiapas y Oaxaca, y en algunos casos, son disipados por la sierra, que funge como una barrera.

 

 

Por último, Hernández Dehesa enfatizó que hasta el momento, nadie, ni la propia ciencia, puede predecir cuándo va a ocurrir un temblor, por ello alertó que no se dejen engañar de los ‘loquitos, pitonisas o chiflados’, que supuestamente anuncian estas catástrofes.