Por riesgo Hospital del Niño no ha retirado bala perdida a menor

La directora del Hospital del Niño “Rodolfo Nieto Padrón”, Silvia Gutiérrez Lucatero aseguró que el nosocomio le ha otorgado la atención debida a Williams, menor de 9 años, que recibió una bala perdida el sábado pasado en el Parque Central de Tenosique.

En entrevista con Telereportaje, señaló que, si bien el paciente ingresó desde el sábado en la noche, no se le ha intervenido quirúrgicamente para extraerle el proyectil, a como solicitan sus tutores, porque los especialistas continúan evaluando el caso.

Indicó que se trata de una situación compleja, puesto que la bala se alojó cerca de la columna, en la parte del cuello del menor.

“Afortunadamente dentro de todo lo catastrófico que pudo haber sido tenemos una bala alojada en el cuello y que se tiene que valorar riesgo-beneficio”, aseveró.

Afirmó que “la decisión que se tome tiene que ser la mejor, porque abordar el cuello no es cosa sencilla”, por lo que aún los especialistas no han concluido con el estudio del caso.

Expuso que en tanto se mantendrá en vigilancia en el área de urgencias.

“Hasta ahorita en la última nota que puso el especialista que lo valoró en neurocirugía consideró que no era candidato a retirarle el proyectil, pero eso no quiere decir que, en un tiempo prudente, no necesariamente en este tiempo, sino posterior decidan retirarlo, por eso no se ha ido de alta, necesita estar vigilado por nosotros en observación.”

“Hasta que nosotros veamos qué es lo mejor que tenemos para ofrecerle al niño, mientras tiene que seguir con nosotros”, dijo.

Gutiérrez Lucatero, puntualizó que los especialistas del hospital están tranquilos porque el proyectil pudo haber accionado hasta la médula y actualmente está alojado en el tejido blando.

Insistió que se tiene que hacer el procedimiento más beneficioso para el paciente. 

“No siempre se tienen que retirar esos proyectiles, dependiendo en donde están ubicados y el riesgo-beneficio para el paciente, si para extraer la bala tiene uno que tocar estructuras que puedan comprometer desde la movilidad, la circulación se dice ‘dejo la bala ahí’.

“Pero si consideramos que hay que retirarla, se prepara (al paciente) y se retira”, agregó.

La directora del nosocomio explicó que artefactos metálicos como las balas llegan a encapsularse en el cuerpo, no representando daños.

Sin embargo, dejó en claro que, si la decisión final es no retirarle la bala al menor, éste debe seguir bajo revisiones constantes.

“Sucede con cuerpos extraños, no solamente con artefactos metálicos, que el cuerpo los encapsula y como que se hace una especie de callo que protege la bala y ahí se queda.

“Hay quienes han sufrido accidentes en carretera, de pronto el parabrisas estalla y se le incrusta los cristales en la cara, se le hacen pequeñas tumoraciones donde se encapsula el cristal, tenemos que estar al pendiente que no cause algún trastorno motor, la movilidad, dolor o alguna situación en el tiempo futuro. Nosotros a nuestros pacientes lo seguimos hasta los 15 años”, concluyó.