Desaparece pepenador de la colonia Lindavista; vecinos inician búsqueda

Don José fue visto por última vez hace un mes. Un tramo de la calle Lago de Las Ilusiones, de la colonia Lindavista, en Centro era como su casa.

Se mantenía rodeado de todo lo que recogía diariamente en las calles, por ello su desaparición ha tomado por sorpresa a los habitantes del lugar. 

Era conocido como el pepenador de la colonia, desde que llegó y se estableció aquí hace alrededor de cuatro años. 

“Era una persona tranquila nunca ofendió a nadie, se dedicaba pues a recoger basura y latas que vendía, cosas así para subsistir porque jamás aceptaba un plato de comida, varias vecinas tuvieron la intención, pero siempre lo rechazó.

“Nosotros decíamos que era una persona que se sentía digna que no lo calificáramos como indigente”, dijo.

Su desaparición ha generado diversas hipótesis.

“Lo que sé, por dos versiones, porque ya he platicado con los vecinos, unos que dicen que se lo comió un animal de la laguna y otros que lo vieron subir a un taxi, que se fue bien vestidito con una maleta y que ya no volvieron a saber de él.

“La gente cuenta versiones, pero a nadie le consta la realidad de la situación”, expuso. 

Del hombre de alrededor de 55 años se conoce poco o nada, más que su nombre: José. 

Hay quienes dicen que es originario de Coatzacoalcos, Veracruz, otros afirman que antes rentaba una casa en la zona, pero tras no poder pagar el alquiler se sumó a la estadística de personas en situación de calle.

“Era común verlo todos los días, una vez, en una ocasión se fue como dos meses, que se fue a otro lado, pero dice que volvió porque por allá donde andaba no recogía lo mismo que por aquí.

“-Esa vez se llevó digamos todas sus cosas? - sí, se llevó todo, todo llevó, por ahí dicen que se lo comió un lagarto”, señaló.

Los vecinos se han organizado para buscarlo, sin embargo, el no contar con sus datos personales ha dificultado que se emita una ficha de búsqueda.

“He estado hablando con las autoridades, con los policías, pero desafortunadamente no contamos con un nombre real, no hablaba con nadie de su vida privada. Todo está en rumorología.

“Esta persona como su fuente de ingreso era precisamente lo que él pepenaba, tenía siempre un carrito y lo cuidaba muy celosamente, eso nos llamó la atención y preocupó porque él siempre lo mantenía ordenado y estacionado.

“De un tiempo para acá ya no lo hemos visto y él no aparece y eso nos preocupó porque era algo que cuidaba celosamente”, comentó.

Es así como vecinos buscan a un desconocido que se volvió parte de la comunidad durante los últimos años