Candidatos presidenciales se mostraron nerviosos y a la defensiva en el debate, señala experto en oratoria

Considera Orlando Moscoso, durante su participación en el programa ‘A Fondo con Chuy Sibilla’

El lenguaje no verbal de los candidatos presidenciales durante el primer debate, los mostró muy nerviosos y a la defensiva, consideró el experto en oratoria, Orlando Moscoso, durante su participación en el programa ‘A Fondo con Chuy Sibilla’.

El especialista, señaló que, en el caso de Xóchitl Gálvez, sus gestos y acciones, con un manejo excesivo de tarjetas informativas, terminaron exhibiendo su nerviosismo y falta de preparación para la discusión.

“Ayer sentí a Xóchitl Gálvez como una persona que pudiera tener bastante información sobre los temas relacionados con la agenda política del país en estos momentos, el problema es que no supo estructurar muy bien, porque si su estrategia era el golpeteo, pues entonces no supo estructurar, no supo darle orden a ese golpeteo, era prácticamente un mar de tarjeta, la ahogo la excesiva información que le pasó a su equipo de campaña, su estrategia era la de golpear a través de la información de que dispone sobre los temas de la agenda política, pero no lo supo hacer”, refirió.

“Yo creo que el papel que él llegó a hacer ahí es a golpear, tanto a una candidata como la otra candidata, con el mismo propósito de querer remontar, lo que comúnmente llamamos una sonrisa fingida que fue el caso de él que prácticamente la hora y minutos que se desarrolló el debate estuvo a mandíbula batiente, ese tipo de sonrisa, hasta cierto punto es buena, pero no la puedes estar empleando en todo momento, porque prácticamente cae uno en un cliché y comienza a caerle mal a las personas y obviamente a cómo ha pasado con él, a generar toda una serie de burlas, de memes y demás”, refirió.

Finalmente, señaló que, en el caso de Claudia Sheinbaum, aunque se mostró más serena que sus adversarios, la postura de sus brazos y manos, dejaban ver que estaba a la defensiva.

“Ella estaba prácticamente cruzada de brazos o por lo menos los brazos los tenía descansando sobre la base de la mesa, eso no es otra cosa más que una actitud que está a la defensiva y cómo no podría hacerlo si tomamos en consideración de que es la puntera en las encuestas, obviamente que pues ella se mentaliza y sabe muy bien, que es la enemiga vencer”.

“Es al mismo tiempo también un signo de autocontrol, de vez en cuando ella ladea la mano izquierda para poder contestar, pero de una manera tan tranquila, obviamente también ella ha contestaba cada una de las de los dimes y diatribas que le lanzaban, pero yo la vi muy serena, al momento de contestar”, concluyó.