Estafadores "hambre": Ahora se van contra microempresarios de venta de alimentos
Ya son varios casos los reportados por emprendedores que fueron víctimas
Microempresarios de venta de alimentos han detectado un modus operandi de estafa que están aplicando en Villahermosa, usando como estrategia “transferencias fantasma”, tras un pedido de comida a domicilio.
Ya son varios casos los reportados por emprendedores que fueron víctimas, o que estuvieron a punto de caer en el engaño de los delincuentes, que intentan obtener alimentos sin pagar.
En los últimos casos reportados, los delincuentes usaron diferentes números telefónicos. Se contactaron por WhatsApp con sus víctimas para hacer los pedidos y les enviaron capturas de pantalla de una presunta transferencia a través de la aplicación de Bancomer, con el importe de la orden que hicieron.
Jesús Armando Cupil, de “La Chilaquería Villahermosa”, sostuvo que en su caso confió en la captura de pantalla de la “transferencia” y mandó el pedido.
Cuando quiso reclamar a ese número, debido a que no se le reflejó el recurso en su cuenta bancaria, lo ignoraron, tanto por mensaje de texto, como por llamadas.
“En mi caso lo que sucedió acá, es que hicieron un pedido como de 4 órdenes más o menos de chilaquiles, y al momento de que te piden el total, ellos te hacen la transferencia, supuestamente, pero es una captura de pantalla donde aparece la hora del celular. Confías en la transferencia, porque es un modo seguro de pasar dinero, pero a veces no te refleja en el momento, porque hay bancos que tienen una diferencia de media hora más o menos en el reflejo de la cantidad. Ahí es donde en esos lapsos tú ya entregaste la comida, lo entregas y te vas. Y tú confiado que tienes el dinero. Cuando haces el corte al final del día, ya notas que no tienes esa entrada de dinero”, sostuvo.
Armando Cupil declaró que, a veces, por ofrecer prontitud en la entrega de alimentos, se puede caer en estos engaños.
Agregó que fue hasta que analizó a detalle la captura de la transferencia, que se percató de que había sido editada para hacer creer que le enviaron el importe que correspondía los alimentos.
“A veces por el dinamismo del negocio no te permite estar revisando tu banca, estar al pendiente de todo lo que sucede en la parte económica y hay gente que abusa de esto con la captura de pantalla, y hacen un poco de edición en los costos, en los precios que aparecen de la transferencia, para estafar. Nosotros hemos identificado que el folio sí existe, sí aparece, pero las personas pueden hacer una transferencia de $1 y editan la cantidad, se ve vilmente en el recuadro, cómo hay una manipulación de los fondos, ya cuando te pones a analizar bastante, bien hay un contraste en los colores”, dijo.
Más recientemente, otro negocio de comida rápida, “Cotis Burgers MX”, estuvo a punto de caer en la misma estafa. No obstante ya habían leído una alerta que había lanzado “La Chilaquería” y decidieron retener el pedido hasta que no vieran reflejado el pago.
Edgar Martín Ortega, representante del negocio de comida, notó que la dirección a la que debían entregar, era la misma que usaron en otras estafas.
“Nos dimos cuenta no por el número de teléfono, cuando checamos la dirección, es exactamente la misma, nos dimos cuenta que era algún tipo de estafa. Tenemos conocimiento de otras personas a las que también les ha pasado lo mismo y por medio de la publicación que hicimos, también otras personas se han comunicado conmigo, que fueron víctimas o que pudieron haber sido víctimas. Ayer recientemente me habló otra persona y pudo alertarse por medio de mi publicación y ya no cayó en el juego de la misma persona”, expuso.
RecomendacionesDesde su experiencia, hizo una recomendación a los microempresarios que aceptan transferencia, para no caer en el engaño.
“Mi recomendación como siempre sería checar la transferencia. Si hay algún tipo de duda que tengan sobre la transferencia o pueda no reflejarse en algún momento, por ser bancos diferentes, que le envíe el código de rastreo de la transferencia para que lo pueden checar en Banxico, ahí sale si la transferencia realmente existe, si realmente salió de una cuenta a otra”, manifestó.
El especialista en temas de Derecho Informático, Rodolfo Guerrero Martínez, precisó que los delincuentes han encontrado una forma fácil de estafar, pues por este mecanismo es raro que se haga una denuncia ante las autoridades.
“Por eso el robo hormiga de este tipo de modus operandi no se denuncia, porque por $200 o $500, la gente dice: Ya se fijó, vendo más y con eso ya me compenso”, dijo.
Los microempresarios quisieron difundir la manera en la que operan los estafadores, para que más negocios sepan del modus operandi y eviten caer en el engaño.
Y aunque pensaron que habían sido víctimas de casos aislados, al hacerlo público notaron que los delincuentes lo están haciendo con otros negocios.