Sufre sacerdote persecución de hombres armados en Chiapas
Circulaba cerca de la presa de Malpaso, pero se detuvo en un paraje para comer, a partir de allí, comenzaron a seguirlo
El sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio, director del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello A.C., sufrió una persecución por parte de hombres armados en Chiapas.
El “padre Fili”, como es conocido, circulaba la mañana de este miércoles en un automóvil cerca de la presa de Malpaso, pero se detuvo en un paraje para comer.
El equipo de seguridad del párroco se percató del riesgo de detenerse, por lo que decidieron no hacerlo y tratar de llegar a la caseta, lo que provocó una persecución “persistente y amenazante”.
El Centro de Derechos Humanos Minerva Bello relató que, cuando la camioneta se percató de que el auto del padre Fili llegó a la caseta, se dio la vuelta. Luego pidió apoyo en dos retenes que están en la zona.
Sin embargo, sentenció que ni la Guardia Nacional ni el Ejército prestaron auxilio al sacerdote, quien viajó a Chiapas para dar acompañamiento a normalistas de Mactumatzá y a personas migrantes.
La asociación hizo un llamado enérgico a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que garanticen la integridad física y psicológica de su director.
Destacó que “la labor del padre Fili como defensor de derechos humanos, así como la que realizan muchas otras personas defensoras a lo largo y ancho” del país, “tiene una importancia decisiva para lograr el respeto, la protección y la observancia de las normas relativas a los derechos humanos, por lo que necesitan y merecen la protección que la Declaración sobre los defensores de los derechos humanos”, establece.