Nuestro cerebro reptiliano se encarga de protegernos de posibles amenazas y asegurar nuestra supervivencia

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La teoría del cerebro triple, fue desarrollada por Paul MacLean, el cual entendía el cerebro humano, como un compendio de tres cerebros en uno. Hoy quiero escribir sobre algo que quizás no todo el mundo conozca, y que, en el gremio de la psicología, neuropsicología, neurología etc… se conoce como la teoría de los 3 cerebros que poseemos los humanos: el reptiliano, el límbico y el neocórtex.  

El cerebro actual que poseemos los humanos, es 3 veces superior al de los primates y es fruto de una evolución donde se han ido creando tres sistemas neuronales que regulan la adaptación conductual y fisiológica. La teoría de Paul MacLean apareció en la década de los 60s para explicar la función de los rastros de evolución existentes especialmente en la estructura del cerebro humano. Se fundamenta en la idea de que en el encéfalo humano habitan 3 sistemas cerebrales distintos, con sus propias lógicas de funcionamiento, y que cada uno de ellos ha ido apareciendo en nuestra línea evolutiva de manera secuencial, el uno sobre el otro. Estos tres cerebros serían relativamente independientes y decía que se relacionarían entre sí siguiendo una jerarquía, dependiendo de su antigüedad y lo importante de sus funciones para nuestra supervivencia. 

En este artículo de Psicología, hablaremos sobre qué es el cerebro reptiliano: partes y funciones. Además, vamos a darte a conocer con detalle en qué consiste este tipo de cerebro

Es el encargado también de llevar a cabo algunas conductas inconscientes e involuntarias como nuestra respiración, la presión sanguínea, la temperatura, el equilibrio, entre otras. El cerebro reptiliano o complejo reptílico ocupa aproximadamente el 5% del total de nuestra masa cerebral. Hace que aparezcan conductas simples e impulsivas, parecidas a rituales que siempre se repiten del mismo modo, dependiendo de los estados fisiológicos del organismo: miedo, hambre, enfado, etc. Cuando se adentra en terreno desconocido, se siente sumamente amenazado y prefiere huir y escaparse antes de enfrentarse a algo nuevo. Puede entenderse como una parte del sistema nervioso que se limita a ejecutar códigos programados genéticamente cuando se dan las condiciones adecuadas. 

El cerebro reptiliano está formado por el sistema reticular, el cerebelo, los ganglios basales y el tallo cerebral. A continuación, te explicaremos brevemente en qué consiste cada una de estas partes del cerebro

-Ganglios basales: Se trata de estructuras neuronales que se encuentran conectados entre sí y están ubicados en lo más profundo de la corteza cerebral. Los ganglios basales tienen como función principal procesar la información acerca de nuestro propio movimiento corporal para ajustarlo a las distintas situaciones. Por ejemplo, cuando queremos conducir un coche, tenemos que llevar a cabo ciertas acciones y movimientos corporales para hacerlo de manera correcta. Nos ayuda a planificar nuestras acciones para conseguir algún objetivo. 

-Sistema reticular: Se trata de un conjunto de neuronas que se encentran ubicadas en el encéfalo, cerca de la médula espinal. La función principal de este sistema es regular el estado de sueño y de vigilia. También es el encargado de filtrar la información que llega a través de los sentidos, escogiendo aquellos datos que son de su interés y haciendo a un lado los que resultan irrelevantes, los cuales finalmente no alcanzan a llegar a la consciencia. 

-Cerebelo: Se trata de una de las partes más antiguas de nuestro cerebro y está ubicado en la fosa posterior del cráneo. La principal función del cerebelo es mantener un adecuado equilibrio y coordinación muscular. 

-Tallo cerebral. Está ubicado entre lo que resta del encéfalo y la médula espinal. El tallo cerebral está formado por 4 diferentes áreas que están conectadas con el diencéfalo. La tarea principal del tallo cerebral es servir de vía de circulación de casi todas las vías sensoriales, con excepción de la olfativa y la visual. 

El cerebro reptiliano cumple con diferentes funciones en nuestra vida diaria: 

La supervivencia. Como ya hemos visto anteriormente, la principal función del cerebro reptiliano es la de mantenernos protegidos ante cualquier amenaza que se presente y así mismo poder asegurar nuestra existencia. Aunque sin duda es una función esencial y sumamente importante, en ocasiones, si no sabemos controlarla, nos puede impedir lograr nuestras metas y objetivos vitales a la hora de enfrentarnos a situaciones nuevas. Esto es porque percibe las nuevas situaciones como posibles amenazas y prefiere quedarse en el “área segura”. 

Regular funciones vitales básicas. Como vimos anteriormente, se encarga de la regulación de nuestras funciones básicas como la respiración y las funciones cardíacas. 

Evita el dolor. Se encarga de buscar el placer y todas aquellas sensaciones que le resulten agradables a la persona. 

Comportamiento territorial. Se trata de uno de nuestros propios instintos de supervivencia lo que nos hace que tendamos a defender nuestro hogar y así mismo cuidar de las personas más cercanas a nosotros y nuestras pertenencias. 

Necesidad reproductiva. Para asegurar la supervivencia, el cerebro reptil se encargar de activar nuestro instinto y motivación sexual que provoca que nos atraigan otras personas. 

2.-El cerebro límbico: Apareció con los mamíferos más primitivos y sobre la base del complejo reptiliano, fue presentado como una estructura responsable de la aparición de las emociones asociadas a cada una de las experiencias que se viven. Su utilidad tiene que ver con el aprendizaje. Si una conducta produce emociones agradables, tenderemos a repetirla o a intentar cambiar nuestro entorno para que se produzca de nuevo, mientras que, si produce dolor, recordaremos esa experiencia y evitaremos tener que experimentarla otra vez. 

3.-La neocorteza: El neocórtex es el hito evolutivo más reciente del desarrollo de nuestro cerebro. En esta estructura tan compleja reside la capacidad para aprender todos los matices de la realidad y de trazar los planes y las estrategias más complicadas y originales. Si el complejo reptiliano se basaba en la repetición de procesos totalmente por la propia biología, la neocorteza era permeable a todo tipo de sutilezas provenientes del entorno y del análisis de nuestros propios actos. Para Paul MacLean la neocorteza podía considerarse la sede de la racionalidad en nuestro sistema nervioso, ya que nos permite la aparición del pensamiento sistemático y lógico, que existe independientemente de las emociones y de las conductas programadas por nuestra genética. 

Si bien es cierto que hace décadas que se descartaron estas postulaciones de MacLean, su popularidad, sobre todo en las redes, se debe a que esta historia evolutiva resulta congruente, hasta reconfortante para nosotros. Es una forma de darnos a entender que nuestro raciocinio ha vencido a nuestra parte más primitiva y animal y, por ello, hemos conquistado el planeta y convertido en la especie más inteligente y desarrollada que existe. Así que la próxima vez que te hablen de tu cerebro reptiliano, recuerda que es solo una historia romántica del pasado. 

Psic. Sara L. Campos Chavolla. Consultorio Torre Médica Av. Méndez 1110 Segundo Piso Tel 9933141178 Cel 9931498830