Ministra Ríos Farjat rechaza recibir dinero de retiro “por dignidad”

En su carta renuncia, la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Margarita Ríos Farjat, señaló que no participará en la elección popular de ministros y que renuncia a su pensión por retiro que le brinda esta institución.

En el documento, detalló que para conservar su dignidad no cobrará el haber vitalicio al que tienen derecho los integrantes del Alto Tribunal: “Para mantener mi espacio de dignidad y libertad personal, opto por no aceptar, bajo tales condiciones y llegado el momento, el pago de la cantidad de dinero mensual a la que tengo derecho como futura integrante en retiro de este tribunal”.

Agregó que retornará “tranquilamente y sin apego ese dinero a la Tesorería de la Federación si es que, antes o después, no logro cristalizar una forma de donarlo íntegramente a niños en situación de vulnerabilidad. Después de todo, siempre son las generaciones siguientes las que resienten el quehacer de las actuales y la ausencia cada vez mayor de empatía, solidaridad y educación cívica”.

Por su parte, el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá dijo que se equivocó al creer que prevalecería la razón por encima de las pasiones, lo que le impidió imaginarse un escenario como el que actualmente vive México.

En su carta de renuncia como ministro, dejó en claro que su decisión de renunciar no implica de alguna manera su aceptación -tácita o expresa- “de las decisiones políticas adoptadas en meses recientes”.

“Me equivoqué al creer que prevalecería la razón sincera y libre por encima del clamor de las pasiones. Y mi error, como el de muchos, nunca me permitió imaginar un escenario como el actual. Aunque tengo la fortuna de continuar ejerciendo el encargo que ha sido para mí un honor desempeñar y en el que he tratado de servir al máximo de mis capacidades, para continuar en él, hoy se me pretende someter a una contienda electoral masiva e incierta”, manifestó.

Asimismo, aseveró que no participará en el proceso de selección de nuevos ministros porque es antitético a su labor y vocación.

“No participaré en un proceso en donde se vea orillado a realizar promesas que sé que no podré cumplir en buena conciencia, que impliquen una renuncia a mi promesa de ejercer el cargo de juez con imparcialidad y mesura, mirando únicamente a la Constitución, a los hechos del caso y no a los clamores de las mayorías”, asentó.