Mantiene Moody’s en B1 calificación de Pemex, pero con perspectiva negativa

La calificadora Moody’s informó ayer viernes que mantuvo la calificación crediticia de Pemex en B1, sin embargo, cambió la perspectiva de estable a negativa, y advirtió que “es poco probable” que mejore la calificación en el corto plazo.

La firma explicó que la perspectiva negativa de las calificaciones de la empresa productiva, se debe a que “seguirá registrando un flujo de efectivo libre negativo”, que no podrá invertir para aumentar la producción ni las reservas actuales, la débil liquidez y la alta dependencia a los apoyos gubernamentales para financiar la necesidad de efectivo y para pagar las deudas.

“Es probable que la compañía enfrente mayores riesgos crediticios debido a su incapacidad de aumentar las inversiones de capital y de mejorar su desempeño financiero y operativo, como resultado de las restricciones de liquidez”, señaló.

Moody’s también resaltó que son persistentes las pérdidas en refinación de la petrolera, por lo que requiere de grandes sumas de financiamiento externo.

La decisión de mantener la calificación de la empresa productiva en B1 (al considerarse altamente especulativa) con perspectiva negativa, agregó, tiene que ver con “el acceso limitado de Pemex a los mercados de capitales debido a su riesgo crediticio intrínseco elevado y a la falta de medidas que mitiguen su exposición a los riesgos ambientales, sociales y de gobierno corporativo”, indicó en un comunicado.

Entre los aspectos positivos, señaló que la petrolera mantiene en niveles “relativamente estables” la producción y las reservas de petróleo y gas; además de que incrementó la producción de condensados; no obstante, “dada la inhabilidad de Pemex para invertir grandes sumas de capital en exploración y producción, Moody’s estima que en 2023 y 2024, la compañía solo podrá mantener la producción y las reservas en los niveles actuales”.