Renuncia princesa japonesa a realeza y se casa con plebeyo

 

Luego de tres años de retrasos en su boda, la princesa japonesa Mako por fin renunció a la realeza y llevó a cabo la ceremonia civil con su novio, Kei Komuro, un joven plebeyo.

Al realizar la boda, Mako perdió su condición real y adoptó el apellido de su esposo. 

Ella y Komuro fueron compañeros de clase en la Universidad Internacional Cristiana de Tokio, y en el 2017, anunciaron que tenían intenciones de casarse al año siguiente, pero una disputa financiera los llevó a suspenderla.

Ella es la primera integrante de la familia imperial -desde la Segunda Guerra Mundial- en no recibir dinero al casarse con un plebeyo. Para poder contraer matrimonio renunció a 140 millones de yenes (1.23 millones de dólares) a los que tenía derecho.