En controvertido experimento, científicos crean embriones con mezcla de mono y humano
Un equipo de científicos encabezado por el español Juan Carlos Izpisua creó 132 embriones mezclando células de mono y humano.
El experimento se realizó en China y tres de los embriones (pelotitas de hasta 10 mil células) lograron crecer 19 días fuera del útero, cuando el estudio fue interrumpido. Estas estructuras son conocidas como quimeras, en referencia a los monstruos de la mitología griega con cabeza de león, vientre de cabra y cola de dragón.
De acuerdo al líder del equipo, el objetivo eventual es generar órganos humanos en ganado porcino que sirvan para trasplantes y puedan salvar vidas.
En el nuevo experimento se utilizaron óvulos de hembras de macaco, los fecundaron con espermatozoides de la misma especie, y tras seis días de cultivo se obtuvieron 132 diminutos embriones. A estos se agregaron 25 células humanas reprogramadas para convertirse en piel, músculo, hígado o corazón. El resultado fue una bolita con 10 mil células con un porcentaje humano de 7%.
En este caso los embriones fueron destruidos, quienes critican el experimento temen que otros traten de llevarlo un paso más allá.
Científicos han señalado que el estudio presenta desafíos legales y éticos.
“El objetivo actual es digno de aplauso, pero quizá habría que plantearse también si se puede utilizar para otros fines, como crear una especie de sujeto intermedio. El riesgo es abrir un camino que puedan recorrer otras personas”, advirtió Federico de Montalvo, presidente del Comité de Bioética de España.