‘¡Gracias Totales Cerati!’

 
La euforia después de ese último concierto brindado en el campus de la universidad Simón Bolivar de Caracas era inigualable. Los amigos reunidos y celebrando la culminación exitosa de la gira “Fuerza Natural” que había llevado a Cerati y su banda por todo América Latina y Estados Unidos, les permitía por primera vez en mes y medio, relajarse con la sensación de haber cumplido la meta.

De repente, Gustavo sintió que algo no iba bien. Súbitamente todo se puso borroso, no podía entender lo que le decían sus amigos, y en cuestión de segundos notó la cercanía de todos y de nadie, con el tiempo sabríamos que estaba sufriendo un ataque cerebral isquémico que lo llevó a estar dormido cuatro años, en estado de coma, antes de fallecer.

Su legado es impresionante. Líder de una de las bandas musicales latinoamericanas más exitosas de todos los tiempos, fungiendo como músico, cantautor, compositor, productor, vocalista y con un carisma que eclipsaba todos los demás talentos juntos.

Supo llevar los sentimientos de toda una generación a la música, donde dejó inmortalizados frases y melodías dignas de enmarcar en el playlist histórico de los grandes temas del rock. Hoy lo recordamos en el día de su nacimiento, y remarcamos esas expresiones que de su mente brincaron a la música, y de la música a nuestro lenguaje cotidiano.

“Yo, caminaré entre las piedras, hasta sentir el temblor, en mis piernas, a veces tengo temor, lo sé, a veces vergüenza.”

Con esa línea, minimalista, simple, sencilla y a la vez profunda, toda una juventud latinoamericana supo que Cerati sería su líder, porque comprendía y plasmaba en sus letras lo que millones de jóvenes sentían en esa dura etapa de la búsqueda de identidad, donde existe un conflicto profundo entre lo que te dicen que debes hacer, y lo que realmente deseas hacer, ese temor, esa ruptura, ese momento de confusión que termina siendo la fuente del temor que te llega a afectar como un temblor, y sólo por pensarlo o sentirlo, te llena también de vergüenza.

Grande Gustavo.

La música siempre celebrará el 11 de agosto, al hijo pródigo de Buenos Aires, Argentina, la tierra que le vio nacer, le vio partir, y lo distinguió como Ciudadano Ilustre en reconocimiento a su trayectoria.

Cerati, argentino de nacimiento, en realidad fue de todos, también de México, y también de Tabasco. Desde la tierra del tango y las pampas logró cimbrar al edén tabasqueño como pocos.

El tema “De Música Ligera” contiene una frase que hace a la gente cantar como un coro perfectamente sincronizado, y a todo pulmón, haciendo subir los decibelios de las multitudes cuando lo reconocen, con la mítica oración:

“Ya que el amor de música ligera, nada nos libra, nada mas queda.”

Pero en la competencia de decibelios, quizás la frase de sus canciones que más gritos y euforia genera es la contenida en el tema “Persiana Americana”:

“Se que te excita pensar, hasta donde llegaré, es difícil de creer, creo que nunca lo podré saber, sólo así yo te veré, a través de mi persiana americana.”

Hoy desde esta columna, recordamos el día que Gustavo Cerati llegó al mundo, y cuyos talentos quedaron inmortalizados en su música, aquella que aún seguimos disfrutando y cantando como el primer día de su lanzamiento.

Escucha los grandes temas de la música, así como sus íntimas historias, hoy sábado a las 6pm en el programa de radio “La Máquina del Tiempo de Kiko Aquino Rubio”, por 104.1 FM y www.xevt.com

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