Llama Iglesia Católica a tener fe en que Cristo vive

A tener fe y confianza en que Cristo está presente aunque no lo puedan ver, fue el llamado que hizo la Iglesia Católica en el domingo de divina misericordia.

En el mensaje dominical, el vocero de la diócesis de Tabasco, el padre Denis Ochoa, manifestó que Jesús quiere convencer a sus discípulos que él está vivo, que no es un fantasma.

“Jesús quiere convencer a sus discípulos, a la iglesia, que él está vivo, que él no es un fantasma, que él no está muerto, sino que ha vencido a la muerte, él surge victorioso de la muerte, en segundo lugar Jesús quiere que nosotros creamos en él, y la fe es la confianza y la aceptación de la presencia de Jesús vivo aunque yo no lo vea, aunque yo no lo toque, yo creo que Jesús está vivo”, externó.

En ese sentido, el párroco expresó que la fe no es tener que ver alguna aparición, pues indicó que muchos feligreses es lo que esperan para creer.

“Pero la fe no es así, la fe en este sentido es difícil, porque no es complacencia a nuestros ojos corporales, a nuestros oídos, no es complacencia de que yo lo pueda tocar al Señor, sino que es aceptación de su persona, repito, porque su palabra me lo dice, yo estoy aquí”, aseguró.

Finalmente, Denis Ochoa refirió que el que sientan que Dios no está presente, no significa que no le sean ajenos los padecimientos de los más necesitados.

“Al Señor no le es ajeno el sufrimiento de tantos hermanos por eso Jesús le sigue diciendo al Tomás de hoy, trae acá tus dedos mete tu mano en mis llagas, en mi costado izquierdo, ¿cuáles llagas?, las llagas de los hermanos que sufren, las llagas de las víctimas de la guerra, hoy en Siria, las llagas de tantos hermanos invadidos por la pobreza extrema a causa de la corrupción terrible que desencadena miseria”, expresó.

A no menospreciar a los inmigrantes pidió la Iglesia Católica

A ver el rostro de Cristo en los migrantes pidió la iglesia Católica a la feligresía y tratarlos con humanismo.

Ante la denuncia que presentó el Movimiento Migrante Mesoamericano sobre que los indocumentados siguen siendo víctimas de secuestro e incluso de mutilaciones, el vocero de la diócesis en Tabasco, el padre Denis Ochoa, pidió a las autoridades y a la ciudadanía a darles un trato humano y no despreciarlos.

“El problema inmigratorio no es algo agradable para nosotros, por eso es problema, y no es agradable para el gobierno, ni para la sociedad, sin embargo, tenemos que ir más allá de los que sentimos, y poder nosotros aplicar el humanismo, son seres humanos y si lo vemos desde la fe pues son el rostro de Jesucristo”, manifestó.